Un taxista está grave. Salió disparado de su unidad. Cayó de cabeza sobre el concreto hidráulico del libramiento Sur de Tuxtla Gutiérrez, luego de ser impactado de costado por una veloz camioneta. El conductor de ésta, también se lastimó. Ambas unidades quedaron destrozadas.
Pablo David Salazar González, de 46 años, conducía el taxi tipo Tsuru con número económico 1754 y placas 3270- BHE.
Presuntamente salía de la carretera antigua al zoológico, de sur a norte. Eso dijo en su declaración el otro conductor. Y al llegar al libramiento Sur, no esperó el paso de los autos que iban con preferencia. Y cruzó.
A más de 80 kilómetros por hora, con el semáforo en verde, Leonel Náñez Díaz, de 36 años, avanzaba de poniente a oriente sobre el libramiento Sur.
Conducía la camioneta Dodge Ram, blanca, con permiso de circulación número 27330, a nombre de Juan Carlos Aguilar Ruiz.
La camioneta se impactó de frente en el costado izquierdo del taxi. Le sumió ambas portezuelas.
Tras el fuerte impacto, el taxi fue aventado al otro carril, y quedó de oriente a poniente.
A su vez, la camioneta se fue contra un árbol del camellón central, giró 180 grados y derrapó unos seis metros. Quedó también de oriente a poniente.
El taxista, que al parecer no llevaba el cinturón de seguridad, salió disparado unos cinco metros del taxi. Cayó de cabeza sobre el duro pavimento. Quedó inconsciente.
Leonel se asustó. Creyó que estaba muerto, pero no huyó. Se sabía inocente.
Aunque lastimado también, pidió a los paramédicos del ERUM que valoraran a Pablo David.
Cuando era atendido el taxista recobró la razón. Leonel se alegró.
“Ya viste amigo lo que hiciste. Yo soy el del otro carro. Si estabas cansado o con sueño te hubieras orillado”, dijo.
Pablo fue llevado en malas condiciones al hospital Gilberto Gómez Maza. Leonel, fue certificado ente el médico legista de la Procuraduría General de Justicia.
Los autos destrozados fueron llevados al corralón en una grúa particular.