11 años de Stan y el desfalco inhumano de Pablo Salazar

El 4 de octubre del 2005 fue un día para no olvidar. Miles de familias vieron cómo las fuertes corrientes de los ríos se llevaban su patrimonio: casas, vehículos y empresas. Lo perdieron todo.

A once años de distancia, miles de damnificados por el Huracán Stan que fueron beneficiados con una vivienda, todavía no cuentan con el documento que les acredite que la propiedad es de ellos; es más, en algunos casos, ni el Gobierno Federal o del Estado cuenta con escrituras de los terrenos que utilizaron para construir fraccionamientos en virtud a que son tierras ejidales.

Del total de las viviendas edificadas y otorgadas a los damnificados, hasta el momento solamente cuatro mil han sido escrituradas a partir del mes de mayo del 2014, cuando el actual gobernador Manuel Velasco Coello publicó el primer decreto para emprender un programa de regularización.

Un informe de la Promotora de la Vivienda de Chiapas (Provich) precisa que las escrituras corresponden a los fraccionamientos Vida Mejor I, II y III y Los Palacios en Tapachula; Vida Mejor en Huixtla, Nuevo Suchiate, en Suchiate; Juan Sabines Guerrero, en Comitán; Huehuetán I y II, en Huehuetán; San José Margaritas y Francisco Villa, Tuxtla Chico.

Asimismo, El Carmen Cintular y Santa Anita, de Acacoyagua; San Antonio La Granja, de Cacahoatán; La Flor, de Tuzantán; Nuevo Horizonte y Nuevo Villa Comaltitlán, de Villa Comaltitlán, en donde están en proceso de regularización 500 más.

Sin embargo, sin escrituras permanecen fraccionamientos completos en Motozin-tla, Frontera Comalapa –Paso Hondo-, Siltepec, Villacorzo y Mazatán, entre otros municipios, en donde la irregularidad en la tenencia de la tierra es el principal problema.

En materia de salud mientras tanto, seis centros tuvieron que ser reubicados; seis hospitales regionales, ocho comunitarios, 73 centros de salud rural y 21 urbanos, rehabilitados.

La Coordinación de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, y su similar estatal, recomendó desde el 2006 la reubicación del Hospital General de Zona 01 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) al haber sufrido severos daños y ubicarse en una zona de muy alto riesgo en las márgenes de los ríos Coatán y Coatancito en Tapachula.

A pesar que desde hace ocho años se viene hablando de la construcción del nuevo hospital del IMSS, apenas hace unos meses se concluyó el proceso para la escrituración de los terrenos donde se ubicará y aunque se dice que se cuentan con los recursos superiores a los mil 400 millones de pesos para su edificación, todavía no es publicada la licitación del mismo.

Por otra parte, en materia de educación, de 259 escuelas que sufrieron daños, 111 presentaron pérdida total, lo que motivó a las autoridades a buscar espacios para la construcción de las nuevas.

Se pierde territorio

El Huracán Stan fue causante de la pérdida de territorio nacional; el río Suchiate en varios de tramos cambió su ruta, con lo que se calcula que más de dos mil hectáreas quedaron del lado guatemalteco.

Productores afectados por esa causa han venido exigiendo al Gobierno Federal la construcción de protecciones sobre el afluente, y si bien existen avances considerables, todavía se corren riesgos en caso de presentarse otro fenómeno similar.

Alto riesgo

Así también, de acuerdo con el Centro Nacional de Prevención del Desastre (Cenapred), el paso del meteoroen los primeros días de octubre del 2005, dejó en evidencia que “existe un elevado número de de asentamientos humanos ubicados en zonas de riesgo”.

Es más, establece que la ciudad de Motozintla, considerada el corazón económico de la Sierra Madre de Chiapas, es una de las más expuestas y vulnerables frente a los embates de la naturaleza, debido a las características geográficas de la región en la que está ubicada, así como el alto grado de marginación social.

Por ello, advierte la necesidad de ubicar reservas territoriales para el establecimiento de asentamientos humanos más seguros.

No hay castigo

Sin embargo, a pesar de haberse detectado el desvío de recursos públicos destinados para la reconstrucción durante la administración del exgobernador Pablo Salazar Mendiguchía, a once años de distancia no se ha procedido en contra de los responsables.

Aunque éste fue detenido durante el gobierno de Juan Sabines Guerrero, nunca se le investigó por el presunto fraude de más de mil cien millones de pesos detectados por la Contraloría del Estado, en las auditorías practicadas durante el proceso de reconstrucción.

Ante ello, el Movimiento de Lucha de los Damnificados por el Huracán Stan continúa solicitando que se realicen las investigaciones de las denuncias efectuadas ante la Procuraduría General de la República (PGR).

Asimismo, una decena de exfuncionarios de distintas dependencias estatales fueron sancionados administrativamente e inhabilitados por periodos de tres a ocho años para ocupar cargos en la administración pública, mismos que ya concluyeron.

Pero la demanda de justicia en el caso del fraude cometido en la reconstrucción por el meteoro en las regiones Costa, Soconusco, Sierra y Frailesca continúa después de once años.