La dirección fue difícil de encontrar. Otra vez jugaron al “teléfono descompuesto”. Se dio mal la dirección en dos ocasiones por parte del C-4i.
Se dijo que en el incendio de la casa había dos personas quemadas. No había nadie. Fue una verdad a medias.
Don Mariano y su esposa salieron a un mandado. Cerraron con llave la casa con el número 316, en la Avenida Sureste, entre Oaxaca y Quintana Roo, en el fraccionamiento Bonampak.
En su ausencia se propagó el fuego en la bodega de su vivienda. El vigilante de la colonia estaba parado en la esquina cuando vio el humo que salía de la parte alta de la casa.
Al ver que había fuego corrió a llamar al presidente de la colonia. Juntos corroboraron el incendio y llamaron al 911.
El operador del número de Emergencias hacía muchas preguntas. Al final se enredó todo.
Reporte confuso
A los “tragahumo” se les dijo que era en la colonia Bicentenario, por la colonia Agua Azul. Luego que era por el hotel Niza.
En realidad era por la colonia Monte Azul, pasando el Centenario, atrás del hotel Niza, pero en la colonia Bonampak.
Erróneamente se dijo que había dos personas quemadas, por lo cual acudió la ambulancia PCA-03 de Protección Civil Municipal. Por fortuna Mariano y su esposa estaban fuera.
Al regresar a casa, cuando iban llegando, la esposa le decía a Mariano: “Huele a quemado, ¿no será que alguien olvidó apagar la estufa y se están quemando los frijolitos?”. Ignoraba que era su casa la que ardía.
Pero la oportuna intervención del vigilante, un policía de Proximidad, impidió la pérdida del inmueble.