Era un “semaforazo”, pero uno de los implicados aceptó su culpa y tras un diálogo civilizado entre las partes, las unidades se movieron para liberar la vía. No hubo lesionados.
El automóvil marca Ford tipo Fiesta, color plomo, placas DPZ-2790, circulaba de norte a sur sobre la prolongación de la 5ª calle Poniente, en Tuxtla Gutiérrez.
El conductor observó el semáforo en amarillo. La calle es de bajada y pensó que con acelerar un poco podía ganarle a la luz roja que estaba por aparecer.
pero de poniente a oriente sobre el carril de baja, en el Libramiento Norte, avanzaba ya con preferencia la camioneta marca Toyota color negro, placas CW-73934 de Chiapas. Un hombre y una mujer iban a bordo. El impacto fue en la parte delantera lado derecho del coche, con la parte delantera lado izquierdo de la camioneta.
Tras el choque el auto compacto se subió a la acera. La camioneta avanzó hacia el oriente. Aunque a mujer que iba como copiloto fue sacudida por el golpe, no quiso que llegaran los paramédicos.
Peritos de Tránsito Municipal acudieron al lugar para hacerse cargo del percance y deslindar responsabilidades. “Es un semaforazo”, dijo el comandante. Es decir, ambos tenían culpa y cada uno se hará cargo del daño material de su unidad. Pero sede modo honesto el conductor del Fiesta aceptó su culpa y decidió pagar todo, con la ayuda de su aseguradora.