Buenos Aires celebra con tacos y mariachis
Los puestos fueron adornados con el tradicional papel picado, sombreros de mariachi, guitarras, maracas y chiles.

Lazos colmados de banderitas mexicanas adornaron la Avenida de Mayo, apenas a unos pasos de la emblemática Plaza de Mayo, para recordarles a los visitantes la celebración de la cultura de México, en una jornada en la que también se homenajeó a Ecuador.

Un Chapulín Colorado vestido con su inconfundible traje rojo, sus “antenitas de vinil” y su “chipote chillón” hizo las delicias de los niños que les pedían a sus padres que se detuvieran para tomarse una foto con el héroe que es famoso en toda América Latina.

En los costados de la Avenida de Mayo se colocaron puestos de comida mexicana que ofrecieron tamales, gorditas, totopos con queso y agua de jamaica y tamarindo.

Pero las estrellas, sin duda, fueron los tacos al pastor, que se han popularizado ahí en los últimos años y que provocaron que se hicieran filas de más de 50 personas que esperaron pacientemente para comer al amparo de un soleado día del invierno austral.

Expertos taqueros atendieron a los comensales, entre quienes había argentinos ávidos de probar nuevos sabores, y mexicanos residentes en Buenos Aires que añoran los platillos de su patria.

Los puestos fueron adornados con el tradicional papel picado, los típicos sombreros de mariachi, guitarras, maracas y, por supuesto, chiles mexicanos en sus más diversas variedades. Entre los mares de gente que acudieron a la festividad destacaron mexicanas portando el emblemático traje de china poblana o los típicos vestidos de Chiapas y Jalisco, y que a cada paso eran detenidas para tomarse fotos por el público.

También hubo espacio para una ofrenda de Día de Muertos que, como suele suceder, provocó una especie de admiración por su colorido diseño, y de temor por un tema que, para muchos, sigue siendo tabú. Con la pintora Frida Kahlo al centro, la ofrenda contaba con flores de papel a imagen y semejanza del cempasúchil, velas, calaveritas, frutas, incienso y hasta cerveza y tequila.

Una vez comidos, los visitantes se sentaban a disfrutar el espectáculo musical que incluyó bandas de rock, cantantes de corridos y música norteña y que culminó con un mariachi que hizo bailar a toda la concurrencia.