Más de 14 personas fueron detenidas y puestas a disposición de la autoridad, luego de que se suscitara una gresca en la que comerciantes ambulantes, identificados con el Mocri, realizaron una manifestación violenta para evitar el banderazo de inicio de una obra de pavimentación y recuperación de espacios públicos en la avenida Juárez Norte entre Guerrero y Morelos y la recuperación de espacios públicos, aduciendo que la obra los afectaría en sus ventas.
Los ambulantes armados con palos, tablas y lo que pudieron, se cubrían el rostro con pañuelos y pasamontañas, aducían que les quitarían el espacio durante el tiempo en que se realiza la obra, a la llegada de los funcionarios municipales, se inició la agresión a los policías que custodiaban el lugar para iniciar la obra pública, algunos comerciantes ambulantes y otros más de los que se desconoce su origen pero que se agruparon con estos para realizar la protesta e impedir las acciones oficiales.
A pesar del llamado a la cordura, la valla de uniformados y de locatarios del mercado que acudieron al evento, los policías recibieron una lluvia de piedras y agresiones lo que generó la gresca en el que locatarios también fueron agredidos, los acontecimientos iniciaron poco después de las 11:40 horas y se prolongaron por varias horas e incluso realizaron un protesta hacia la presidencia municipal.
Una comitiva de los inconformes mantuvo un diálogo con funcionarios municipales encabezados por el alcalde Laparra Calderón, sin embargo, al terminar la plática en la zona del mercado donde el resto del grupo esperaba respuestas y fueron informados, volvieron a ponerse agresivos y amenazaban con quemar la presidencia, incluso trataron de retener al secretario municipal, Rubén García Matus, lo que fue impedido por la fuerza policiaca.
De acuerdo a reportes el grupo de personas inconformes tienen consigo recipientes con gasolina, garrotes y piedras, su intención es la de manifestarse en la presidencia municipal para incendiarla, pero esto ha sido impedido por los uniformados, poco después de las cuatro de la tarde del sábado, fuerzas federales de la Marina llegaron a la ciudad de la piedra para mantener la calma.