Debido a que el fin de semana la casa de Luis Arvey Pérez Cruz, defensor civil de los Derechos Humanos en Arriaga, fue incendiada casi en su totalidad, se busca el apoyo gubernamental para corroborar si lo ocurrido en su hogar se trata o no de una amenaza directa.

A las afueras de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), refirió que es necesario que las instancias gubernamentales implementen medidas de seguridad para protección de él y de quienes integran el Comité Ciudadano de Defensa denominado “El Coloso de Piedra”.

Puntualizó que los mecanismos de seguridad para los activistas han sido poco efectivos y tampoco hay suficientes patrullajes, situación que hace vulnerable a los defensores civiles.

Contexto

En Arriaga, hace unos días, fue ultimado a balazos Sinar Corzo, también reconocido a nivel nacional por las actividades que realizaba en favor de los derechos humanos, situación que derivó en la renuncia del alcalde.

El pasado viernes, él lanzó una convocatoria abierta a la ciudadanía, para conformar un Concejo Municipal en Arriaga, debido a que no hay autoridad en la zona, tras la destitución del edil.

Pérez Cruz mencionó que a su casa llegaron peritos de la Fiscalía para analizar las causas que provocaron los incendios; aunque no se adelantó para dar algún veredicto, sí puntualizó que los activistas viven en una situación vulnerable en el estado.

Ese mismo día le avisaron que su casa se había incendiado en su totalidad, por lo que es necesario que se implementen no sólo medidas de seguridad, sino también acciones que le permitan tener una vida digna, porque se quedó sin nada.

Expuso que anteriormente no había sufrido ninguna amenaza y que, por salud mental, no quiere pensar que se trata de un atentado; en caso de ser así, dejaría el estado considerando las consecuencias mortales que han vivido otros activistas en Chiapas.