Chiapas fue el estado más castigado con la inflación en el año que cierra, sólo por debajo de San Luis Potosí. Y aunque el Inegi publica un porcentaje del .57, en realidad el poder adquisitivo fue tan deprimente que algunos productos incluso duplicaron su costo al finalizar el 2018, con relación al inicio del año.

La Secretaría de Economía del estado de Chiapas retomó datos del Inegi y publicó en su página oficial en enero del 2018, que la ciudad de Tapachula registro´ una tasa de inflacio´n anual de 5.52 por ciento en el 2017, por debajo de la inflacio´n nacional (5.55%). Poco duró el gusto.

A mediados del 2018, el Inegi publicó, por vez primera, el índice de inflación por cada estado, ubicando a San Luis Potosí en primer lugar con el .60 por ciento y a Chiapas en segundo con el .57 por ciento. Esto significaba una inflación cinco veces mayor que en Nayarit.

Y si bien algunos chiapanecos no son contadores ni economistas, a la hora de ir a la tienda pudieron notar que el poder adquisitivo del peso mexicano estaba en picada, mientras el dólar americano repuntaba.

Así, al ir de compras a un centro comercial en diciembre del 2018, el carrito del mandado lucía a la mitad que como figuraba en enero del mismo año. La deducción es sencilla: los precios se duplicaron.

En un recorrido por algunas tiendas, se pudo comparar los precios. Con ticket en mano, se observó que algunos productos subieron 40, 60 y hasta un 100 por ciento sus precios con respecto al inicio del año.

Por ejemplo, el litro de aceite que inicialmente costaba 18 pesos, hoy está en 26. Una lata de atún de marca promedio costaba 5.50 pesos en enero, hoy el mismo producto cuesta 12.20 pesos. La avena en bolsa de 400 gramos costaba 6 pesos, ahora está en 12.70 pesos.