Productores de café de las diferentes fincas del Estado de Chiapas viven la peor crisis como consecuencia de la contratación de mano de obra guatemalteca, esto derivado de la paridad de la moneda, ya que el peso mexicano en comparación con el quetzal tiene una diferencia por lo menos de un 60%. Lo que ha generado que muchos jornaleros no hayan acudido al corte de café en Chiapas.
Por un lado los cafeticultores señalan que eso generó grandes pérdidas, toda vez que el café se cosecha en los meses de noviembre y diciembre, es la temporada de maduración. Sin embargo al no contar con jornaleros, la diversas fincas cafetaleras tuvieron grandes pérdidas que no se habían presentado en ningún otro año, ya que los campesinos cortadores -los pocos que han venido contratados de Guatemala- lo hicieron porque no contaban con trabajo en su país, sin embargo señalan que no les reditúa buenas ganancias.
Esto ha generalizado en la contratación de mano de obra en los cultivo agrícolas de temporada, como son el plátano, papaya, la caña y el café.
Lo que ha orillado a los cafeticultores del soconusco y zona sierra mariscal, a pagarle más a los cortadores para poder motivarlos y evitar pérdidas catastróficas, sacrificando sus ganancias. Hasta el momento no hay aliciente para el cafeticultor que se está afectado.