Hasta seis huracanes podrían tocar tierra

Juan Gabriel Limón, delegado de la Cuenca Sur de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), informó que para este 2019 se prevé la formación de 33 ciclones, seis por arriba del promedio histórico, de los cuales 19 se presentarían por el océano Pacífico y 14 por el Atlántico.

Temporada de ciclones

En el Pacífico serán ocho ciclones que podrían ser tormentas tropicales, cinco alcanzarían la categoría de huracán 1 o 2 en la escala Saffir-Simpson y seis categorías 3, 4 o 5. Mientras que en el Atlántico, el pronóstico es de seis tormentas tropicales, cinco huracanes categoría 1 o 2, y tres huracanes que podrían alcanzar categoría 3, 4 o 5.

Por tanto, Gabriel Limón, acompañado de representantes de la Secretaría Estatal de Protección Civil, dijo que ante el riesgo potencial que representan estos fenómenos meteorológicos para la entidad y la probabilidad que de cuatro a seis ciclones impacten al territorio mexicano, destacó la importancia de la preparación y la prevención.

El delegado expresó que de forma general se presentará un déficit en las precipitaciones por cuarto año consecutivo, además aclaró que actualmente todas las presas de Chiapas se encuentran en un 50 por ciento o más de su capacidad.

Conagua decidió colocar los siguientes nombres para identificar a los 19 ciclones que se presentaran en el Pacífico: Alvin, Bárbara, Cosme, Dalila, Erick, Flossie, Gil, Herriette, Ivo, Juliette, Kiko, Lorena, Narda, Octave, Priscila, Raymond, Sonia y Tioo.

Por su parte, para el Atlántico, los ciclones tropicales serán identificados como: Andrea, Barry, Chantal, Dorian, Erin, Fernand, Gabrielle, Humberto, Imelda, Jerry, Karen, Lorenzo, Melissa y Nestor.

Cabe señalar que, a nivel nacional, Conagua cuenta con un plan de actuación en tres etapas: antes, durante y después de la ocurrencia de estos sistemas ciclónicos.

Durante la etapa 1, previo a la temporada de lluvias, a través del Servicio Meteorológico Nacional dependiente de la Conagua, se vigilan y monitorean los fenómenos climáticos que pudieran afectar al país las 24 horas del día. También el Comité Nacional de Grandes Presas analiza las condiciones meteorológicas e hidrológicas, para prever sus posibles efectos.

En la etapa 2, durante los eventos, se incrementa la frecuencia del monitoreo atmosférico y se actualizan los pronósticos, se vigila la operación de las obras hidráulicas y de los cuerpos de agua para que ante la ocurrencia de un fenómeno climático que pudiera poner en riesgo la integridad de la población, la Conagua avisa de manera oficial a Protección Civil.

En la etapa 3 se lleva a cabo la atención y reconstrucción, donde la Conagua realiza un dictamen técnico de corroboración que permite a Protección Civil publicar la Declaratoria de Emergencia en el Diario Oficial de la Federación, para que así los estados puedan acceder a los recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden).