La presidenta de la Comisión de Vigilancia del Congreso del Estado, Bárbara Melissa Mañón Campos, reconoció que continúan las irregularidades en los procesos de entrega-recepción por parte de los exfuncionarios, a pesar de las sanciones que existen para aquellos personajes que no cumplan con sus responsabilidades.
Aseguró que han enviado un oficio a la Auditoría Superior del Estado (ASE), para que informen del número de ayuntamientos que cumplieron al 100 por ciento con estas actividades municipales.
En ese sentido, comentó que a su oficina han llegado las actas circunstanciadas por parte de los presidentes y presidentas municipales en funciones, es decir, documento en el que se expresan las anomalías de esta obligación municipal.
Puntualizó que a las Comisiones unidades de Hacienda y Vigilancia se les turnó el tema de la cuenta pública; se espera una revisión de los penúltimos nueve meses de la administración estatal.
Insistió que los regidores y presidentes municipales están expresando esta preocupación, pero tienen que enviar oficios a la ASE para que desde el Congreso del Estado se elabore una tabla de seguimiento.
Aclaró que es la Auditoría el organismo que dictaminará los resultados finales de los procesos de entrega-recepción. En lo que respecta a las cuentas públicas, pidió a las nuevas autoridades a que no dejen acumular toda la carga de trabajo, porque ya arrancaron con estas obligaciones.
La legisladora local mencionó que es fundamental establecer una charla con los ediles, para que no cometan errores que no sean corregibles, porque no permitirá actos de corrupción o favores políticos con los funcionarios.
De las cuentas públicas de administraciones pasadas, refirió, se han entregado pero hay observaciones, es decir, la Comisión tiene que revisar qué ayuntamientos arrastran anomalías en la integración de los expedientes.
Finalmente, aseguró que también tiene conocimiento de la situación financiera que vive el municipio de Cintalapa con deuda a proveedores y con los laudos.