“La declaración de Puerto Chiapas como una de las tres Zonas Económicas Especiales en el país fue anunciada poco después de hecha la homologación del salario mínimo para reforzar el equilibrio que se busca con los estados del norte y fue un anuncio oportuno”, opinó Néstor Gabriel López López, docente e investigador en la Escuela Bancaria y Comercial (EBC) Campus Tuxtla.

Las Zonas Económicas Especiales en México son un modelo que ya ha sido implementado con éxito por otros países, en vista de esto el Gobierno mexicano consideró experimentar con él.

La institucionalización de Zonas Económicas Especiales consiste en el establecimiento de una zona que se caracterice por sus flexibilidad e incentivos fiscales con períodos razonables de duración, gracias a los cuales se estimule la productividad de dicha zona y se logre una mayor estabilidad.

Aunque no se ha definido cuáles serán los estímulos, se mencionó que serán de tipo fiscal, laboral, financiero y de capacitación; además se contempla ampliar a ocho años el el tiempo de flexibilidad fiscal.

Una de cada dos personas en Chiapas trabajan en los sectores menos productivos, que son hotelería y servicios. Con la iniciativa de una Zona Económica Especial estos sectores podrían tener un repunte.

La institucionalización de Puerto Chiapas como Zona Económica Espacial beneficiará a las empresas instaladas en el territorio indicado, así negocios chiapanecos, mexicanos e incluso extranjeros podrán gozar de estos beneficios.

Además, es importante mencionar que esta zona tiene que ser administrada y puede serlo por una entidad pública o privada que se encargará de generar cadenas productivas que reactiven la economía del estado.

Norte-Sur

La Ley fundamenta su propuesta en la comparativa de los estados del norte y del sur, busca enfocarse en los estados del sur, en Guerrero, Oaxaca y Chiapas para generar mayor competencia entre los estados, tomando en cuenta que la competitividad de un país está fundamentada en la competitividad de las empresas.