Choca y vuelca

Una pequeña se acerca al parabrisas roto del colectivo volcado. Siente curiosidad. La misma que sintieron los otros dos conductores involucrados. La de aquella es inocente. La de éstos, maleada. Tres autos con severos daños materiales y un lesionado, fue el saldo del percance suscitado la noche del domingo.

Rodrigo Servando Paniagua Gutiérrez, de 38 años, es hijo de la dueña del colectivo tipo Urvan número económico 6304 y placa 385649-B.

Con esa confianza, decidió experimentar la adrenalina de combinar el volante con el alcohol. Dicen que anoche tenía aliento alcohólico mientras transitaba con la referida unidad de transporte público.

Este avanzaba de norte a sur sobre la 15 Oriente de Tuxtla Gutiérrez.

Y al llegar al Bulevar Ángel Albino Corzo, fue impactado en el costado derecho por otro colectivo tipo Urvan, blanco, con número económico 17 y permiso 674062526/13, de la ruta Tuxtla-Bochil. La unidad casi “volaba”, dice un testigo que iba atrás de este colectivo.

Al parecer el transporte foráneo tenía el amarillo y quiso pasar para ganarle al rojo, pero el colectivo local avanzó, aun antes de tener el verde a favor y se produjo la colisión. Fue un “semaforazo”.

Tras el primer impacto, el colectivo de Servando avanzó sin control, y se fue a impactar por segunda vez contra una camioneta marca Honda tipo CRV, gris, placas DSM-6718, que permanecía estacionada en el carril derecho de la 15 oriente. La dueña, al parecer, estaba comprando en la tienda aledaña.

El colectivo 6304 volcó sobre su costado izquierdo. Rodrigo se lesionó a causa de los dos fuertes golpes.

Al lugar acudió la ambulancia SM-007 del ERUM, la patrulla PC-492 de Tránsito Municipal y la mamá de Servando. “Ahorita viene mi otro chofer”, dijo, creyendo que así de fácil se llevaría su colectivo.

El lesionado fue llevado a la clínica Santa Cecilia. En el lugar se formó un terrible embotellamiento.