Es cierto que llovía, pero no fue la lluvia ni el parabrisas empañado los que provocaron el choque. Fue la falta de paciencia para esperar el paso del coche que llevaba preferencia. El Reglamento lo sanciona como “Falta de precaución”.
El culpable se molesta, y los agentes más, al ver que el reportero de nota roja toma fotos del accidente. Intentan dejar en el anonimato el accidente por obvias razones. Aquél, porque no desea que trascienda su error.
Pero no tienen por qué molestarse con el comunicador. Tampoco deben culpar a la lluvia, al piso mojado, al parabrisas empeñado. Y el que tiene la culpa es el último en reconocerlo.
Ante la falta de datos proporcionados por los agentes de Tránsito Municipal, peatones que observaron el accidente, indicaron que el automóvil marca Seat tipo Ibiza, color negro, placas MVR-3795, del Estado de México, circulaba de norte a sur sobre el bulevar Andrés Serra Rojas.
Y antes de llegar a frente a conocido auto hotel, justo en el retorno que está entra la 9a Sur y el bulevar Ángel Albino Corzo, dio vuelta la camioneta marca Toyota tipo Tacoma, gris, placas CV-86497. Esta unidad iba de sur a norte sobre el mismo bulevar Serra Rojas, y el automovilista decidió incorporarse en el retorno para cambiar el sentido.
Pero calculó mal la velocidad del Seat y avanzó cuando éste apenas pasaba. Y lo impactó en el costado izquierdo.
No hubo lesionados. Los daños eran menores. Aun así, a los peritos de vialidad les costó deslindar responsabilidades. Y eso porque buscaron varios culpables: reportero, lluvia, parabrisas empañado, piso mojado… menos el conductor.