El accidente ocurrió en la capital Tuxtla Gutiérrez. Parecía que el culpable era el automovilista. Y es que normalmente en Chiapas, “el que pega paga”. El colectivo tenía el golpe en la parte trasera, pero el perito dedujo que el chafirete rebasó por derecha y luego se incorporó. “Cría fama y échate a dormir”, dice el refrán.Y el agente lo hizo válido esta vez.
Fue la noche de este miércoles, alrededor de las 21:40 horas cuando la patrulla PCC-496 al mando del perito Mario González, arribó para atender un accidente de tránsito en el bulevar Belisario Domínguez, frente al número 3290.
El colectivo marca Nissan tipo Urvan, con número económico 9011 y con placas de circulación 387666-B del estado de Chiapas, era conducido por Javier Alarcón Román (55 años).
Circulaba de oriente a poniente sobre la referida vía, pero había tres filas de autos avanzando. Sobre la izquierda, pegado al camellón central, transitaba la camioneta marca Ford tipo Explorer, de color negro, modelo 1997, con placas de circulación 312-VJH, del Estado de México. Era conducido por Javier Sánchez Urbina (50 años). Por la derecha avanzaba un taxi.
El colectivero, desesperado por avanzar, rebasó al taxi por la izquierda, pero hizo lo propio con la Explorer por la derecha.
Luego el chafirete se incorporó al carril de la izquierda, pero la camioneta lo impactó, pues no se detuvo.
El colectivero estaba seguro que a la llegada del perito de Tránsito Municipal, le daría la razón porque en Chiapas el refrán dicta “el que pega paga”.
Sin embargo, tras la declaración del automovilista el oficial le creyó. Es que los colectiveros y taxistas se han ganado a pulso la fama de “cafres”.
De esta forma, el agente hizo válido el refrán que reza: “Cría fama y échate a dormir”.