Este lunes 16 de noviembre se llevó a cabo la conmemoración de los 100 años de nacimiento del descubridor de la zona arqueológica de Bonampak, Herman Charles Frey Hofer, mejor conocido como Carlos Frey, ocasión en que sus dos hijos, así como decenas de nietos y bisnietos estuvieron presentes para recordar al personaje.
Los descendientes de Frey acudieron al Parque de la Artesanías en punto de las 10:00 de la mañana, para recordar lo que hizo por Chiapas y México, debido a la gran contribución académica, cultural y turística que ha generado por años esta zona arqueológica.
Carlos Frey llegó a Chiapas en 1941, después de haber recorrido a pie gran parte de las selvas del sureste mexicano, de los estados de Campeche, Yucatán Quintana Roo y Chiapas. Posteriormente se aventuró en las entrañas de la Selva Lacandona en busca de una “ciudad perdida” de la cual había escuchado y que captó su interés de manera inusual.
Otros sitios
“En 1942, mi padre estaba buscando una ciudad perdida, motivo por el cual establece una amistad con un grupo de lacandones habitantes de la zona Lacanhá, donde se encuentran un gran número de asentamientos mayas”, agregó Carlos Frey Solís, hijo del arqueólogo.
Se dice que Frey no solo descubrió Bonampak, sino también otros 11 sitios arqueológicos enclavados en el corazón de la Selva Lacandona, pero éstos son de menor extensión territorial, y se desconoce por qué su descubrimiento no se le atribuyó al conmemorado.
Es el 9 de febrero de 1946 cuando Frey, junto a su amigo John Bourne, un acaudalado estadounidense, descubren el sitio y también los murales dentro de lo que hoy es en Templo de las Pinturas.
A pesar de estos importantes descubrimientos, la figura de Carlos Frey se mantiene un tanto en el olvido y desconocimiento, tanto de la ciudadanía como de las diferentes administraciones municipales y estatales, debido a la falta del debido reconocimiento de este personaje.
“Nos pone un poco triste que los gobiernos municipales, estatales y federales no hayan reconocido debidamente su descubrimiento, ya que otras pinturas como las de Bonampak no se han encontrado en otra parte del mundo”, subrayó Carlos Frey, hijo.
Healy
Actualmente se tiene como descubridor oficial del sitio a Giles Healy, un norteamericano que supuestamente dio con el Templo de las Pinturas cuando realizaba un documental sobre los indígenas de las Selva Lacandona.
Incluso, en una famosa página web de información se le atribuye a Healy el total descubrimiento de Bonampak, así como a dos lacandones que antecedieron al norteamericano en el hallazgo, pero de Frey no se hace mención.
“En realidad, Carlos Frey llevó a Giles Healy a Bonampak, fue así como éste último conoció el lugar. Pero como mi padre no tenía el dinero ni el respaldo suficiente como Healy, fue desvinculado del hallazgo”, puntualizó Frey Solís.
Carlos Frey Solís y Herman Frey Solís, hijos del descubridor, nunca han gozado de algún tipo de privilegio. De hecho sufrieron en su infancia de gran pobreza y se las ingeniaron para salir adelante.
“Sin embargo, se siente uno muy orgulloso de haber tenido un padre así, con esa gallardía, con ese ímpetu, porque difícilmente en la actualidad hay alguien que quiera aventurarse en un lugar inhóspito como la selva, pero afortunadamente nos dio un Bonampak, una ciudad perdida que realmente fue su anhelo”, finalizó Carlos Frey Solís.