Echan “basura” al Reglamento

Tirar basura desde un auto en movimiento está penado con ocho salarios mínimos. Muchos lo ignoran. Algunos lo saben parcialmente. La mayoría infringe el Reglamento. A Tránsito Municipal se le dificulta multar por la flagrancia desfasada. La medida es para evitar inundaciones en las vías de la capital y librar al Cañón del Sumidero de toneladas de residuos.

El taxi tipo Tsuru con número económico 3577 se detiene. El chafirete luce una playera negra con grabado de una conocida cerveza. Al ser abordado mira al reportero y luego huye despavorido ante la pregunta planteada: “¿Sabía usted que Tránsito Municipal está sancionando por tirar basura desde un auto?”, se le preguntó.

Sondeo

Otro coche se detiene en la 3ª Poniente Norte, entre la avenida Central y 1ª Norte de Tuxtla Gutiérrez. Conduce una jovencita.

Se le hace la misma pregunta que al taxista y responde sinceramente que no sabía.

“La multa es de ocho salarios mínimos, unos 604 pesos”, se le explica. La automovilista asiente con la cabeza, levanta el pulgar derecho y dice: “Está muy bien”.

Agrega que ella nunca ha tirado basura desde su auto, pero que sí ha visto a muchos hacerlo.

Luego de suscitarse un accidente en la 3ª Poniente y 2ª Norte, un perito estaba por retirarse cuando un auto pasó por allí y desde adentro alguien tiró un bote vacío de refresco.

Basura devuelta

El oficial levantó la basura, alcanzó al auto que iba despacio y encaró al conductor: “Lo que hizo amerita ocho salarios mínimos de multa, pero por ésta se lo voy a pasar. Sólo le pido que se lleve su basura”, le dijo, y le devolvió el envase.

Es que por personas como ésta, las calles de la capital están repletas de basura. En tiempos de lluvia se tapan las coladeras, las alcantarillas, se inundan las vías y se apegan las casas.

Toneladas de basura en el Grijalva

El río Grijalva es el que más sufre al acumular toneladas de basura en el sitio denominado “El Tapón”.

La mala imagen ahuyenta el turismo y dificulta la navegación en el afluente. Por ello, Protección Civil destinó en la más reciente labor de limpieza, una brigada con 103 personas, tres embarcaciones, dos máquinas y un recolector especial. Se recogió unos 165 metros cúbicos de basura.

Los principales portadores de basura al Grijalva son Tuxtla Gutiérrez, Chiapa de Corzo, San Fernando, Chicoasén y unos 11 municipios más.

Medida desesperada

Como una medida desesperada es que se incluyó en el Reglamento de Tránsito Municipal de la capital chiapaneca, el artículo 98 fracción I, que dice:

“Para efecto de proteger el medio ambiente, queda prohibido lo siguiente: Tirar objetos o basura desde el interior de los vehículos particulares, transporte público de pasajeros, de carga y similares, locales y foráneos.

“Así también deberán colocarse avisos visibles, en el que se informe a los usuarios que arrojar basura a la vía pública es motivo de infracción. La falta del aviso responsabilizará al conductor de la infracción cometida por el pasajero o por los conductores particulares”.

Conocimiento parcial

En la zona Centro de Tuxtla se entrevistó al chofer del taxi tipo Tsuru, con número económico 0285 y placas 8840-BHF. Su pasajero llevaba precisamente un bote vacío de refresco que seguramente arrojaría más adelante.

Al plantearle la misma pregunta sobre el nuevo artículo, el taxista dijo que ya lo sabía, pero ignoraba que el chofer sería multado si el pasajero tira la basura.

“Yo no la he tirado”, dijo el pasajero enseñando la botella de PET vacía.

Chafirete y pasajero coincidieron que es deber del concesionario o de la Secretaría de Transporte proporcionar e instalar el letrero de aviso para que el pasajero no incurra en esta falta de tirar basura a la calle.

También taxista y pasajero coincidieron en que es injusto que el chofer sea multado por culpa del pasajero.

Es que el reglamento estipula una multa de ocho salarios mínimos, aproximadamente 604 pesos, por esta falta.

Solo dos multados a la semana

La Dirección de Tránsito Municipal de Tuxtla Gutiérrez informó que semanalmente infraccionan a dos, en promedio, por este motivo.

“Es muy difícil agarrarlos en flagrancia. Es un segundo el que tardan en tirar el objeto, y las patrullas y elementos son pocos en comparación con los miles de autos”, reconoció el funcionario. Y tiene razón.

Adelantó que en breve habrá una campaña especial enfocada a evitar o sancionar la violación de este artículo.