MODA

Si hoy parece que todas las celebridades se han ido de excursión a la playa es porque Chanel la ha creado para ellas. El desfile de la maison francesa viene siempre con unas expectativas disparadas. Y siempre las supera. Porque Karl Lagerfeld ha construido una playa con arena y olas en el centro de París para presentar su colección primavera-verano 2019, con aires muy noventeros y millennials, donde la logomanía vuelve a ser la estrella.

Parece que Karl Lagerfeld le ha cogido afición a los paisajes marítimos. Porque si el anterior fashion show vino a bordo de un crucero de lujo, ahora las modelos desfilan por la orilla de una playa, que ha sido construida dentro del Grand Palais. Arena, mar y hasta oleaje de verdad han sido el marco perfecto para presentar una colección veraniega y mucho más relajada que de costumbre.

Las modelos se han adaptado perfectamente al ambiente, desfilando descalzas, con sandalias planas o con los tacones en la mano, como haríamos cualquiera de nosotras en un paseo por la playa. Los estilismos también cobran este aire desenfadado que se respiraba hoy en el desfile, marcado por las pamelas de paja y las tonalidades pastel.

Amarillos, tonos melocotón, blancos, azules cielo y estampados veraniegos han sido los escogidos por Karl Lagerfeld para construir sus diseños de próxima temporada. Tampoco han faltado los aires jóvenes, con bandoleras cruzadas, leggings y mallas ciclistas, croptops y cinturones y pendientes oversize. Todos ellos con el nombre de Chanel como protagonista, llevándonos de vuelta a la logomanía excesiva de los años 90. Eso sí, cambiando al icono noventero Cindy Crawford por su hija Kaia Gerber.