Presentan la novela No habrá retorno
La portada del libro publicado por el Consejo Estatal para las Culturas y las Artes de Chiapas. Darwin Mendoza

Las reflexiones en torno a la memoria, el retomar y contar la historia de su abuela, así como hablar del espacio y lugar que toda persona abandona fueron las ideas que llevaron a Claudia Morales a escribir su primera novela, No habrá retorno, publicada por el Consejo Estatal para las Culturas y las Artes de Chiapas en la colección Biblioteca Chiapas.

Este trabajo mereció el Premio Nacional de Novela Breve Rosario Castellanos 2015, y de acuerdo con el fallo del jurado es “una novela de carácter poliédrico. Construida con distintas líneas de acción que se entrelazan mediante una diversidad de tonos narrativos, tiempos y atmósferas”.

La autora explicó que su novela sigue tres líneas narrativas en las que todos sus personajes son migrantes y están intentando llegar a un lugar donde puedan comenzar una vida.

También en este libro, Claudia retoma los recuerdos de su abuela, que llevó una vida difícil como todas las mujeres de su época. “Es la memoria de la abuela. Yo regresé a vivir un tiempo al pueblo donde vivió mi abuela y cuento parte de las historias que ella me contaba sobre su vida, las cuales estaban marcadas por una violencia muy profunda, pero fue sorprendente saber que, pese a ese pasado, yo conocí a una mujer muy fuerte y alegre”, relata.

Sobre el título de la galardonada novela, explica que esto obedece a que el tema central es la memoria, para la cual no hay un retorno como tal, porque muchas veces se piensa que al recordar un lugar hay un regreso, pero eso no es cierto.

Sobre el hecho de que su trabajo haya sido reconocido con el Premio Nacional de Novela Breve, Claudia dice que eso es fundamental porque es importante saber que hay una vida como escritora y es esa misma que tuvo Rosario Castellanos, la que la inspiró para hacer lo que ahora hace.

“Una figura como lo es la escritora, no solo su rol como profesora de la UNAM sino su obra extremadamente lúcida, potente, y su figura, el solo hecho de tenerla como referente fue muy crucial para mí, para perseguir esa vida de escritora”, señala.

Indica que respecto a las obras literarias de Castellanos y de ella, puede haber cierta resonancia en Balún Canán y Ciudad Real, “en las que hay cierta reconstrucción de las ciudades chiapanecas en las que vivieron nuestros padres, y es como una manera de intentar atrapar mediante la escritura esas ciudades que van existiendo en la memoria de los demás”.

Personalmente afirma que ella prefiere la parte narrativa de Rosario Castellanos, ya que Balún Canán es su preferida; no obstante, afirma que toda la obra de Castellanos es sumamente importante.

No habrá retorno fue presentada en el Museo del Café, en donde se contó con los comentarios de Matza Maranto, quien dijo que a lo largo de la novela se puede observar la manera en que dialogan el mundo campesino y el mundo contemporáneo, y es importante la manera en que estos mundos se presentan en la escritura de Claudia al incorporar la antropología para narrarlos.

La novela se presenta este viernes 11 de enero en el Museo de las Culturas Populares, en San Cristóbal de las Casas, a las 18:00 horas.