En un documento que se dirige a la titular de la Secretaría de Cultura Alejandra Frausto Guerrero; a Lucina Jiménez, directora del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura; a Marisa Giménez Cacho, coordinadora nacional de Teatro, así como a los institutos y secretarías de cultura estatales, la comunidad teatral del país solicita información respecto al estado actual del Programa Nacional de Teatro Escolar.
En el primer párrafo del documento se precisa que la duda surge “debido a que no se ha publicado todavía dicha convocatoria, ni existen documentos oficiales respecto a la misma de parte de las instituciones competentes”.
Es por ello que, como “ciudadanos, contribuyentes y trabajadores culturales del país”, piden que “se proceda con transparencia de parte de las instituciones que ustedes representan respecto al destino de este y otros programa culturales, ya que hasta la fecha únicamente ha habido ambigüedad y polaridad en la información”.
Señalan que “las declaraciones no oficiales de parte de institutos y secretarías de cultura estatales aseguran que la Secretaría de Cultura Federal, a través del Departamento de Vinculación Cultural ‘no habían asignado presupuesto a los estados para la realización del Programa Nacional de Teatro Escolar 2019-2020’, así como a otros programa de alcance nacional en materia de teatro”.
Afirman que la situación anterior no solo les parece “grave” sino inaudito en cuanto a los alcances cuantitativos y cualitativos que ostenta el Programa, por ello invitan a los titulares de la dependencia a que se informen sobre el alcance e impacto de dichos programas dentro de la vida cultural del país.
Indican que el registro cuantitativo se puede comprobar en el número de públicos beneficiados, los artistas apoyados, los proveedores contratados, los estados y municipios visitados, el número de funciones realizadas, así como los montos asignados para cada emisión. En cuanto al impacto cualitativo, no asible pero no por ello menos trascendente, representa uno de los objetivos principales del programa como garantizar el derecho a la cultura niñas, niños y adolescentes en la etapa de instrucción básica.
Entre otros de los objetivos está el proveer una experiencia escénica de calidad para audiencias de escuelas de formación básica, apoyar la generación de nuevos públicos, estimular la producción teatral en el país e incentivar el intercambio artístico.
“Es por ello que si dicho programa cumple los diversos objetivos y alcances numéricos, consideramos importante su continuidad. Y si fuese el caso que requiera ajustes, renovaciones o modificaciones, creemos pertinente que se informe y se dialogue con las partes involucradas en pro de una mejora y no de su cancelación”, expresaron.