Construir bien, la clave

A quienes vivimos sobre tierra sísmica sólo nos queda un camino: la prevención, pero prevenir, ¿cómo?

Como no existe, en ninguna parte del mundo, la capacidad científica para predecir un temblor, la única opción es construir bien las casas, edificios particulares, escuelas, hospitales y demás edificios públicos.

El terremoto del 19 de septiembre de 1985 de 8.1 grados que arrasó, en forma destructiva y mortífera, con gran parte del entonces Distrito Federal debió traer un aprendizaje mayor que el de hoy, pero no fue así.

Desde hace 32 años surgió la inquietud de canalizar mejor la prevención a través de instituciones llamadas de Protección Civil, a partir de entonces se fueron creando poco a poco esas dependencias en los tres niveles de gobierno.

A partir de esa fecha se pensó también en que debía haber un fondo de protección de daños y nació el Fondo Nacional de Desastres Naturales, el famoso Fonden.

Desde entonces se pensó de igual manera, y vaya que debió pensarse bien, que debía haber rigor legal de las autoridades y rigor ético de los profesionales en la construcción, los ingenieros y arquitectos, para respetar reglas a la hora de edificar una vivienda, edificios particulares y públicos, que resistieran sismos de esa magnitud, por lo menos.

Tardaron cuatro años en emitir las nuevas reglas de construcción en el país entero y fue hasta 1989 cuando fueron emitidas con la intención de que fueran aplicadas al pie de la letra.

Pero todo parece indicar que no todos aplican con rigor las reglas mencionadas. Es casi un crimen construir a la ligera en Chiapas, tierra de sismos constantes y sonantes.

En Tuxtla Gutiérrez hubo el pasado jueves 7 de septiembre una prueba irrefutable de que las reglas de construcción no han sido respetadas a cabalidad: la zona sur de la ciudad registró el mayor número de casas dañadas por el sismo. ¿La razón? El tipo de suelo es más frágil que el de la zona norte, aseguran expertos, como el geofísico Marco Antonio Penagos Villar.

Y si ya está probado eso, ¿por qué entonces no son aplicadas con mayor rigor las normas para construir en esa zona?

Si el mayor número de daños fue en la zona sur es indicativo indudable de que las casas en esa área no fueron edificadas con las normas establecidas para ese tipo de suelo.

Las autoridades municipales desde aquella fecha -1989- pecaron de ingenuas, obedecieron a intereses particulares recibiendo sobornos de las empresas particulares para hacerse de la vista gorda o simplemente fueron negligentes.

Pero de ahora en adelante no nos queda de otra. Las autoridades supervisoras deben ser estrictas y escrupulosas a la hora de revisar la forma en que están siendo construidas las estructuras que vayan a ser usadas para cualquier tipo de servicio humano –viviendas sencillas, edificios de departamentos, para negocios o, con mucha más razón, los edificios públicos, entre los cuales figuran los hospitales y las escuelas- cuyos riesgos de catástrofe son mayores por albergar a mayor número de personas cada día.

Ahorita siguen las acciones de levantamiento de daños y después vendrá la reconstrucción. Al mismo tiempo habrá de pensarse en qué van a hacer quienes vayan a construir alguna estructura de las mencionadas, revisar el tipo de suelo sobre el cual van a estar edificadas y examinar escrupulosamente el tipo de material que va a ser usado.

Recorre MVC zonas dañadas

Con la finalidad de que sea transparente, la entrega de la ayuda humanitaria en Chiapas está realizándose a través de integrantes del Ejército Mexicano quienes están siendo ayudados por cinco mil comités ciudadanos de Protección Civil del Estado.

Ha sido clave también la presencia del gobernador Manuel Velasco Coello en las zonas afectadas para verificar personalmente que esos apoyos estén llegando efectivamente a quienes más lo necesitan.

Los ciudadanos ya no se quedan callados. Si algo está mal, lo dicen, lo reclaman, lo exigen.

Por eso la presencia del mandatario chiapaneco en las regiones dañadas es importante porque cualquier anomalía de los funcionarios menores bien puede ser denunciada ante su presencia, a efecto de que sea corregida.

En recientes horas estuvo en la Frailesca. Desde ahí apuntó que los apoyos están siendo entregados por el Ejército Mexicano en conjunto con los más de cinco mil comités ciudadanos de Protección Civil a efecto de que esa ayuda no sea condicionada por nadie.

Recorrió Ángel Albino Corzo, El Parral y La Concordia. Estuvo acompañado del director de Prestaciones Económicas, Sociales y Culturales del ISSSTE, Florentino Castro López, enlace del Gobierno Federal en la región.

Velasco Coello verificó el desarrollo del censo que se realiza en viviendas, escuelas y edificios públicos, y que la entrega de víveres y productos de higiene sea a personas que realmente lo necesitan.

Exhortó a las familias damnificadas exigir a las autoridades encargadas del censo les otorgue el folio, que las identifica como beneficiarias de los programas y proyectos de reconstrucción.

El jefe del Ejecutivo destacó la titánica labor de las Fuerzas Armadas para ayudar a la población chiapaneca en labores de distribución de víveres, remoción de escombros y paulatinamente en el proceso de reconstrucción.

La escuela primaria Lázaro Cárdenas del Rio, de Ángel Albino Corzo, resultó severamente dañada. Expresó que serán agilizadas las reparaciones para que los niños regresen a clases lo más pronto posible.

Constató, asimismo, los daños estructurales en la escuela primaria Adolfo López Mateos de La Concordia.

En esa gira reveló que el 90% de estudiantes chiapanecos regresó a clases este lunes porque la estructura de la mayoría de las escuelas no sufrió daños y eso permitió que de alguna manera volviera a la normalidad la vida de estudiantes, padres de familia y maestros.

alexmoguels@hotmail.com