Interludio estacional de mayo

Mayo es un mes particular, entre otras cosas, es cálido y estacional. Entre sus bondades destaca el llamado popularmente “Árbol de Mayo”, que despunta este mes y con cuyas flores, la cultura local, teje collares multicolores en los mercados, semejando ofrendas hawaianas.

Curiosamente, este árbol detecta a la persona triste o con algún pesar y cuando ésta se sienta bajo su sombra, suelta sobre ella sus flores ¿Es un árbol emocional?

El Árbol de Mayo se presenta en variaciones cromáticas y se adapta a climas de calor extremo, donde su cromatismo, anima la choza más humilde.

Crece por igual en acantilados que en jardines, laderas silvestres o banquetas y donde le den “un rinconcito de patio” donde crece consentido de las señoras de los barrios ya que aporta flores a sus santos.

Florece al mismo tiempo que el árbol Flamboyán, al parecer de origen hindú que se arraigó en tierras chiapanecas y que coinciden mayo-junio para su floración espectacular. Juntos le dan al campo, a las aves y a la pupila campesina y ciudadana, una sinfonía de amarillos, naranjas y rojos intensos.

Coinciden en su capacidad de adaptación y resistencia al ambiente variable y son fuente de atracción a las aves y los insectos.

Mayo trae la lluvia y precede “Las horas de junio” del poeta Pellicer, un letargo que anuncia el verano y permite hacer un recuento del camino, pues marca la mitad del año y desdibuja o renueva los propósitos que se hicieron a principios del ciclo anual y que para este mes invitan a la reflexión con buen humor.

Nuestra cultura acostumbra hacer propósitos cuando el año principia y que en mayo ya se reflexionan con acierto o decepción, quizá porque la gente conserva alguna esperanza personal de cambio o prosperidad, cosa que generalmente nunca ocurre.

Los nacidos en mayo, lejos de ser taciturnos, son de carácter fuerte. Si vieron la luz entre el 20 de abril y el 21 de mayo, están bajo el influjo de Tauro, que se caracteriza por su voluntad y la capacidad de llevar las cosas a su plenitud.

El origen del nombre Mayo, es incierto pero puede derivar de la Diosa Maia, hija de Atlas y Pleione madre de Hermes.

Mayo parece ser el mes de las revisiones y recuentos laborales. Es el tiempo que escogen en todo el mundo para reivindicar derechos los trabajadores. Celebraciones maternas universales, Día Internacional de la Diversidad Biológica, varias celebraciones de la ONU.

El día del Plenilunio del mes de mayo en la tradición Budista, marca un ciclo astrológico importante.

En la cultura Zoque y la percepción campesina, mayo es el mes de preparación de la tierra para recibir las primeras lluvias e iniciar la siembra, es el preludio de la fertilidad. Es una temporada incendiaria y pasional por las altas temperaturas.

En medio de todos estos acontecimientos, el tímido Árbol de Mayo, abre suavemente sus pétalos y proporciona una fiesta floral a los sentidos y un interludio visual que representa la esperanza.