Las Piedras Rodantes

¿Regresarán a México los Rolling Stones? El grupo más longevo de la contracultura y el mas icónico del pensamiento generacional que a la fecha “no encuentra satisfacción”. Esta pieza se convirtió en un himno desde la segunda mitad del siglo XX, construida a partir de un motivo rítmico introductorio que se mantiene toda la pieza y sirve de base a una letra rebelde y contestataria que expresa su disgusto ante un sistema que castraba la imaginación y la libertad humana.

Las piedras rodantes toman el nombre de un blues clásico y “Like Rolling Stone” de Bob Dylan. Semánticamente se basa en el concepto de piedras que ruedan por el camino existencial y nunca se detienen. La piedra resiste y tiene corazón de roca, es inmune a la debilidad de los sentimientos.

La existencia de este grupo y su creatividad ininterrumpida vuelve jóvenes a todos y desmiente el calendario biológico social. Demuestra que el rock no tiene edad y su energía mantiene con poderes a quienes osan adentrarse en su territorio.

Sobrevivientes a todo, a sí mismos, los embates de las décadas, las tendencias musicales, la tecnología y al dinero que en algunos casos fue factor de ruptura para algunos grupos.

Los más frescos álbumes de los Stones son los primeros, aunque nunca ha mermado su calidad, teniendo como indicadores de identificación la voz de Jagger y la guitarra rítmica de Richards, el grupo desarrolló un sonido, áspero y de melodía limitada, que fue ganando terreno, sobre todo a partir de sus propias composiciones. A mediados de los sesentas, la conceptualización de una rebeldía social caracterizó sus letras y fue adoptada como icónica generacional.

El regreso de las llamadas “sus satánicas majestades” sería todo un acontecimiento y agotaría las entradas desde las primeras horas, su nueva gira abarcaría Sudamérica, Argentina, Chile y Brasil culminando en México.

Keith Richards publicó recientemente un libro que se llama Vida, donde narra con crudeza las vicisitudes de los Rolling Stones en sus primeros años en Inglaterra, donde inició el grupo en los años sesentas y sus primeras visitas a Estados Unidos, siguiendo los pasos de los Beatles.

El concierto de las piedras rodantes sería una reunión emblemática que no hay que perderse, una experiencia emocional de alto voltaje y un viaje a las arenas del tiempo.