Dedica Quetzaltenango a México Juegos Florales

Al cumplir 101 de realización de sus Juegos Florales Hispanoamericanos, la ciudad de Quetzaltenango, Guatemala, los dedica este año a México, con el beneplácito de Raúl Cueto Martínez, cónsul de la representación diplomática mexicana, en la segunda ciudad más importante del país, que constituye un hecho histórico, toda vez que es la primera ocasión que ocurre en toda su historia.

Seguimos en territorio chapín y el colega Julio Rodolfo Custodio García, presidente de la Comisión Permanente del máximo evento anual cultural en este país centroamericano, nos comenta con mucho orgullo que el Certamen representa la antigüedad demostrada más grande de América, solamente superada por el Premio Nobel.

Una historia que se remonta a 1916, cuando el alcalde quetzalteco Manuel Sáenz Mérida, junto con los escritores Jaime Sabartés, Filadelfo J. Fuentes, Gregorio Aguilar e Ignacio Ocaña, además de los distinguidos ciudadanos Ezequiel de León, Pío M. Riépeli y Osmundo Arriola, fundaron los Juegos Florales que constituyen la presentación más digna de ciudad al mundo, en el ámbito literario que en el correr de los años se ha fortalecido en su prestigio.

En 2017, en que tienen especial dedicatoria para México, se cumplen 101 de su creación. Sin embargo, solamente se han realizado 80 ediciones, por cuestiones de orden político y problemas internos de Guatemala.

La explicación de Custodio García, quien de manera ininterrumpida ha participado en su organización, al indicar que su origen se ubica en las antiguas tradiciones “Floralias” de las remotas épocas del imperio romano, 173 años antes de Cristo, las cuales fueron trasladadas a Tolouse, Francia, en 1323, de donde pasaron a España en el siglo XV, auspiciados por los monarcas aragoneses, hasta arribar a Valencia en el siglo XIX.       

Factor determinante en la germinación de la semilla literaria y poética del principio de los Juegos Florales, fue el respaldo absoluto del también quetzalteco presidente de la República Manuel Estrada Cabrera, al alcalde Manuel Sáenz Mérida. El mandatario celebraría ese año con gran pompa las “Fiestas Minervalias”, dedicadas a la diosa Minerva, que inspiraría al poeta local Osmundo Arriola (1886-1938), para escribir su “Canto a Minerva”, quien resultaría triunfador del primer certamen.

Quetzaltenango, que alguna vez ha sido capital del país, se ha distinguido por ser una Región plena de orgullo por sus costumbres y tradiciones que la distinguen del resto de Guatemala. De ahí la convicción de sus habitantes de que primero había que triunfar y hacer presencia en esta histórica ciudad, para luego irse a la capital….y al mundo. Dicho con mayor enjundia: “Primero Quetzaltenango, después el mundo”.

La ciudad, localizada a 85 kilómetros sinuosos de la Frontera con México y a 200 kilómetros al occidente de la capital nacional, está ubicada a dos mil 333 metros de altura sobre el nivel del mar, y a 200 kilómetros de la capital nacional.

Es conocida de igual forma como Xela o Xeljú, que corresponde a su nombre original en idioma kiché, que significa “bajo las 10 ideas o conocimientos”. Correspondió a los guerreros indígenas mexicanos que acompañaron a los conquistadores españoles, quienes le dieron el nombre de Quetzaltenango o Muralla de Quetzales.

Su relevancia histórica en la vida nacional, quedaría de manifiesto cuando entre 1838 y 1849, Quetzaltenango se convirtió en la capital del Sexto Estado de Los Altos de la Federación de las Provincias Unidas del Centro de América.

Una ciudad de poco más de un millón de habitantes, que sustenta su actividad económica en la producción agrícola, que mantiene su querencia hacia México desde siempre y que ahora la reitera, agradecida por la generosa hospitalidad y solidaridad del hermano mayor del norte, que no coincide con la actitud de quienes viven en la capital, donde prevalece el resentimiento y hasta odio hacia todo lo mexicano.

Los quetzaltecas son de otra hechura, más amables con quienes los visita. El amor a su tierra, explica el presidente de la Comisión Permanente de los Juego Florales, Julio Rodolfo Custodio García, ha tenido sus raíces históricas en tres lapos de tiempo. El primero de ellos en 1825, cuando es elevada a la categoría de ciudad;¸el segundo, en el momento que es convertida en capital entre 1838 y 1840; el tercero, con la fundación de los Juego Florales, en 1916.

La Comisión Permanente fue creada por la Municipalidad de Quetzaltenango, para que en su custodia, este colectivo de hombres y mujeres tengan a bien por siempre, la preservación de tan elocuente elemento de unidad de habla hispana.

Con 20 años de permanencia como fiel guardián del cumplimiento e los objetivos de la Comisión, ahora bajo su responsabilidad, el periodista Custodio García se refiere a la que llama voz mayor guatemalteca, Luis Cardoza y Aragón, quien en su momento afirmaría que “la poesía es la única prueba concreta de la existencia del hombre”.

Recuerda que los periódicos de las distintas épocas posteriores a la fundación de este magno evento cultural anual, han dado fe en sus páginas de los buenos trabajos literarios y poéticos, presentados por los literatos en los distintos concursos celebrados en Xela.

Tan resultaron atractivos, que algunos de los pensadores de aquellos días, como Carlos Wyld Ospina y Alberto Velázquez, decidieron por siempre vivir en Quetzaltenango, a los que se sumaron los petas sudamericanos Porfirio Barba, Jacob y José Santos Chocano., por citar algunos, que dejaron como herencia par la comunidad sus obras inscritas en las páginas de los diarios locales.

Las paredes de la sala de recepción del majestuoso Teatro de la Ciudad, construido hace 20 años, dan fe de los ganadores de los Juegos Florales, al estar plasmados los nombres de cada uno de los ganadores del Certamen, desde su inicio hasta los días actuales. Se combinan ahí las galerías que muestran las reinas de la belleza de los eventos, en las que se mezclan los nombres y apellidos de jóvenes de descendencia local y otras de origen alemán.   

Monumento histórico que ha resistido terremotos, para mantenerse permanentemente preparado para recibir las diferentes manifestaciones culturales, como las que ahora corresponde presentar a México        

Existe una distinción extraordinaria en grado de Maestría, para aquellos concursantes que han obtenido tres primeros lugares en la misma especialidad, como ha quedado registrado con los poetas Werner Ovalle López, quetzalteco, y David Escobar Galindo, salvadoreño. Ambos ostentan el título de “Maestre en Gaay Saber”. Hay otras Maestrías en Teatro, conocidas como “Mestre en Dramaturgia”, mientras que también se otorgan los de “Mestre en Narrativa”, para los ganadores en la rama de Prosa, que incluye Novela, Cuento y Ensayo.

El evento cultural se realiza entro de las celebraciones de la Feria de la Independencia, cada 12 de septiembre, en el Teatro de la Ciudad, done se premia a los poetas y escritores que obtuvieron el Premio Unico en las especialidades de Poesía, Cuento y Teatro. En algunas ocasiones se ha incluido Ensayo.

Una de las tareas fundamentales de la Comisión Permanente, integrada por ciudadanos quetzaltecos, es la de elaborar las bases del concurso y difundirlas, además de mantener comunicación con los diferentes países de Hispanoamérica para buscar jurados idóneos para cada rama, recibir los trabajos participantes y hacérselos llegar a quienes los calificarán.

Realización de un control muy estricto, pues se investiga si los trabajos enviados a la Comisión Permanente, han participado en otros concursos y si cumplen con todos los requerimientos establecidos en las bases, para que en caso de que no se acaten, se separen del Certamen.

Los escritores participan en forma anónima, tanto para  la Comisión y los Jurados. Los, interesados depositan un sobre con su trabajo y lo calzan con un seudónimo. Dentro de ese mismo envío, se incluye un sobre cerrado en el que se rotula en la carátula el nombre de la obra y el alias para no ser identificado, mientras que dentro del mismo vienen los datos completos del autor, nombre, edad, dirección, nacionalidad y un breve currículum.

Cuando se tiene el veredicto de los Jurados, se realiza un acto solemne en el Salón de Sesiones del Concejo Municipal y se conocen los resultados enviados por los Jurados. Entonces, conociendo la obra laureada, se tiene a la mano el sobre que viene dentro de esa obra y se procede a abrirlo en presencia de la prensa y público que desee asistir y se proclama solemnemente el nombre de los ganadores en las ramas participantes, los cuales se otorga una presea de oro, un pergamino y 30 mil quetzales.

El presidente de la Comisión Permanente, Custodio García, reitera que “somos un colectivo de hombres y mujeres respetuosos de todas las expresiones culturales, religiosas y espirituales; trabajamos ad honorem por amor a Quetzaltenango con el único fin de enaltecerlo a través de la literatura”.

Nuestra misión, subraya, es la de promover el certamen anual para que represente la unidad entre los escritores de habla hispana, dándoles el honor que merecen a través de los reconocimientos públicos en la velada anual; enaltecer el idioma castellano, impulsando la difusión literaria acorde a la realidad. .

Este año de 2017, el experimentado diplomático Raúl Cueto Martínez, cónsul en Quetzaltenango, de la Embajada de México en Guatemala, cumple fiel y dignamente con el compromiso de corresponder la gentileza de la Comisión Permanente organizadora de los Juegos Florales Hispanoamericanos, al invitar a las instituciones culturales oficiales de Chiapas, Tabasco, Campeche y Yucatán, para que acudan a esta ciudad a mostrar lo mejor de sus tradiciones y costumbres.

Satisfacción del representante de la Cancillería mexicana, porque durante la primera presentación de la Delegación de Chiapas, el Teatro de la Ciudad se mostró pletórico en todos sus 700 espacios que fueron

rebasados fácilmente por una concurrencia de mil quetzaltecos, ávidos de vivir momentos de hermanamiento con sus vecinos más próximos en el territorio mexicano.

Y lo importante, que el respetable público quetzalteco volcó sus emociones y amor por México, al aplaudir de pie la presentación dl ballet folclórico de la Compañía Danzarte, invitado por la directora de la Casa de Cultura del Consejo Estatal para las Culturas y las Artes de Chiapas, en Tapachula, Norma Arellano Peñuelas, por instrucciones del director general de la institución, Juan Carlos Cal y Mayor Franco.

Los orgullos organizadores del magno evento cultural anual de la ciudad, se mostrarían también satisfechos, manifestando que “Quetzaltenango es el futuro, teniendo presente el pasado”.

Premio Nacional de Periodismo 1983 y 2013. Club de Periodistas de México.

Premio al Mérito Periodístico 2015 y 2017 del Senado de la República y de Comunicadores por la Unidad A.C.