Roya del café

En el año 2012, el resurgimiento de la plaga de la roya del café causó serios estragos, tanto que en la cosecha 2015-2016 fue una de las consideradas peores en la historia del país con 2.2 millones de quintales, tanto que se tuvieron que importar 3.2 millones de sacos para cubrir la demanda interna. Del ciclo 2017-2018 todavía no se tienen cifras claras del cierre, pero de acuerdo con las autoridades se va recuperando paulatinamente.

A pesar de ello, en Costa Rica las autoridades lanzaron la alerta sobre una variedad de la roya, más letal que la anterior y urgió a los países productores de Centro y Sudamerica, así como a México, a tomar las medidas necesarias para enfrentarla con acciones preventivas.

La directora ejecutiva del Instituto del Café de ese país, Xinia Chávez Quirós, en un documento distribuido el 25 de enero pasado señala la gravedad del problema al quebrantarse la tolerancia que por muchos años mantuvo la variedad Costa Rica 95 (CR-95), un catimor que durante 34 años soportó todas las razas de esa plaga.

Esa institución y el Ministerio de Agricultura y Ganadería de esa nación ha enviado muestras al Centro Internacional de las Royas del Café localizado en Portugal para que se constate esa nueva raza de roya que ya está en algunas localidades, pero por los vientos y cambios climáticos se puede diseminar muy rápidamente como ocurrió en años anteriores y recomienda a los productores mantener la observación de sus plantaciones y realizar buenas prácticas en sus parcelas.

Esto ya puso en alerta a cafetaleros mexicanos y en particular de Chiapas, en donde fue que resurgió con intensidad la plaga a mediados del 2012 y que actualmente se encuentra diseminada en todos los estados productores del país, en los que se tiene una superficie cultivada de 730 mil hectáreas, aunque el 90 por ciento de ellas se concentran en Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Puebla y Veracruz, de acuerdo con los datos registrados por el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP).

La roya del cafeto causada por el hongo Hemileia Vastatrix, fue detectada por primera vez en México en 1981, en la región del Soconusco, en tanto que entre junio y octubre del 2012, resurgió con en forma agresiva y consecuencia de ello, las cosechas se vinieron a pique, hasta en más del 50 por ciento en algunos casos como el de nuestra entidad, en donde los riesgos siguen siendo muy altos.

De acuerdo con el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) en los estados de Chiapas, Colima, Estado de México, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí y Veracruz, entre el 2017 y 2018 se realizaron actividades fitosanitarias en una superficie acumulada superior a los 288 mil hectáreas, en donde se han detectado “focos de infestación de la enfermedad”.

Ese organismo dependiente de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, afirma que entre los objetivos de los programas están el reducir los niveles de incidencia y severidad de la roya del cafeto, mediante la aplicación de acciones de control y a la vez, concientizar a los productores de café sobre las actividades complementarias al control químico o biológico que les corresponde realizar para minimizar el daño ocasionado por la enfermedad.

A pesar de ello, se tiene la experiencia que las instituciones gubernamentales del sector en la pasada crisis por la roya no actuaron con prontitud y eficiencia, lo que hace que hasta ahora todavía no se logre recuperar la producción que en México llegó a superar los seis millones de quintales por cosecha, aunque por las constantes crisis en el sector había caído hasta 4.4 millones de quintales y con la plaga hubo un momento de 2.2 millones, lo que demuestra la magnitud del problema.

Ahora desde Costa Rica de lanza la alerta de una nueva variedad de la roya del café y tanto las dependencias del sector federal y estatal, como los productores deben de tomar sus medidas de prevención, tomando en consideración que de ese cultivo dependen varios millones de mexicanos en zonas de altos niveles de marginación y pobreza. Advertidos están. 

A escena

En materia de seguridad, en Cacahoatán se han salido las cosas de control, tanto que a partir de ayer el Ejército mexicano, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado y la Policía Federal, han instrumentado un programa permanente de patrullajes que incluyen tanto la zona urbana como rurales. En ese lugar desde hace tiempo ha venido operando una banda delictiva que presuntamente en la actual administración local ha retomado auge, porque según dicen los habitantes cuentan con la protección de las autoridades municipales, por lo que han solicitado una investigación a fondo y el desmantelamiento de la misma… En donde la problemática de la delincuencia también está tornándose difícil es en el norte del estado, sobre todo en Palenque en donde el sábado fue asesinado un líder transportista, aparte de varios ataques armados a comerciantes, por lo que han urgido a las autoridades de los tres niveles de gobierno coordinar acciones en la materia para contener la inseguridad… El éxodo migratorio que se está registrando por la frontera sur ha sido motivo que grupos de funcionarios federales y legisladores realicen turismo, supuestamente para atender la problemática, aunque nada solucionan. Los últimos que llegaron fueron integrantes de la Comisión de Asuntos de la Frontera Sur encabezados por Raúl Eduardo Bonifaz Medrano, Mari Cruz Roblero Gordillo y José Luis Elorza Flores, éste último diputado federal por esa zona, quien hasta ahora se dio cuenta de la necesidad de trabajar para tener una frontera digna, sustentable y con desarrollo económico, según menciona en sus redes sociales. Ojalá que ahora, esos legisladores soliciten que se le dé a esta región el mismo trato que el gobierno federal le brinda al norte… Hasta la próxima.