Emergencia portuaria

Puerto Chiapas, que en los últimos años se le ha promovido como un lugar estratégico para el desarrollo regional del sur-sureste del país, corre el riesgo de quedar inoperante y con ello, el golpe para la economía sería severo. El llamado de auxilio al gobierno federal ha sido lanzado por productores de banano que exportan hacia los Estados Unidos para que se proceda al desazolve de los canales de navegación, porque de no hacerlo en unos meses más ya no podrán ingresar los barcos de gran calado que llevan la carga, aunque tampoco los cruceros turísticos o graneleros.

La situación es preocupante porque desde hace más un año no se le da mantenimiento y ello propicia que a estas alturas los barcos cargueros tengan que hacer maniobras especiales para ingresar y salir cuando las mareas están altas. La Secretaría de Marina-Armada de México, incluso podría verse afectada si el azolvamiento se incrementa, por ser la que resguarda la seguridad nacional en las aguas del Pacífico fronterizas con Guatemala.

Puerto Chiapas es una vía de salida para el mundo por el mar y su ubicación estratégica hizo que en el 2016 la empresa comercializadora trasnacional Chiquita abriera una nueva ruta para el traslado del banano chiapaneco hacia los Estados Unidos; semanalmente ingresa y sale un barco con 350 contenedores de la fruta -250 mil toneladas anuales-, por lo que el cierre de la misma sería un golpe mortal para un sector estratégico productivo y económico para la región.

Antes de esa fecha, los productores locales se veían obligados a llevar la fruta hacia Puerto Quetzal –en el Pacífico- y San José –en el Atlántico- en Guatemala, lo que les generaba altos costos y serios problemas para cruzar las aduanas para poder exportar y Puerto Chiapas fue su salvación, pero ahora los riesgos crecen y por ello la urgencia de atender la emergencia portuaria no solamente en cuanto al desazolve, sino también las ampliaciones de las zonas de carga y descarga al estarse incrementándose paulatinamente los volúmenes de exportaciones.

En los municipios del Soconusco y la Frontera Sur se cultivan más de 15 mil hectáreas de banano y plátano macho cuyas cosechas se envían al extranjero por la vía marítima, que resulta más barata y menos riesgosa, sobre todo que esta región del país es la más lejana a los mercados o centros de comercialización.

Fue en el 2008 cuando los productores lograron estabilizar la producción después de los golpes sufridos por diversos fenómenos naturales y empezaron a exportar pero a través de los puertos guatemaltecos; después de tres años de hacerlo por Puerto Chiapas enfrentan el riesgo de que por falta de mantenimiento en los canales de navegación se suspenda la entrada de los barcos cargueros.

La Secretaría de Marina-Armada de México cuenta con las dragas para hacer trabajos preventivos que son urgentes, pero la autorización y los recursos para ello tiene que proporcionarlos el gobierno federal que ojalá entienda la magnitud del problema, caso contrario no solamente se estaría afectando a un sector productivo sino también a otros, entre ellos el turístico por la llegada de cruceros que también ya han enviado sendos mensajes para mejorar la seguridad regional. 

Llama la atención que durante la administración federal anterior se impulsó a Puerto Chiapas como Zona Económica Especial, sobre todo por la salida a los mercados del mundo por la vía marítima, pero resulta que no le puso importancia al mantenimiento o el desazolve que debe ser constante; al actual gobierno no parece importarle ese proyecto que pretendía impulsar el desarrollo regional y todo está suspendido, hasta algunas empresas interesadas en invertir han determinado esperar más tiempo.

Con el problema que se enfrenta por el azolvamiento de los canales de navegación la incertidumbre crece y por ello, los productores han lanzado el SOS hacia el gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador y el estatal de Rutilio Escandón Cadenas, siendo éste último que ya inició gestiones para que la Semar haga trabajos emergentes para evitar daños mayores, a sabiendas que la economía de esta región de Chiapas depende en mucho de la producción bananera.

A escena

Julián Nazar Morales, el aún dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Chiapas denunció públicamente ayer la incursión de un grupo armado de encapuchados a uno de sus ranchos, en el que causaron serios destrozos, tanto que levantaron hasta los pisos y rompieron los techos, llevándose entre otras cosas, documentos y papelería diversa. Estos se dijeron ser de la Agencia Federal de Investigación (AFI) pero en el organigrama de la Fiscalía General de la República desapareció desde hace varios años, por lo que el exdiputado federal solicitó una audiencia con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; el titular de la FGR, Alejandro Gertz Manero y de Seguridad Pública Federal, Alfonso Durazo, con la finalidad que se atienda esa situación y se llegue a las últimas consecuencias de la investigación y se aclare, porque al tratarse de un dirigente partidista se puede prestar a muchas cosas, sobre todo que Nazar Morales como exdirigente de la CNC y exsecretario del Campo del Estado, ha sido seriamente cuestionado por la falta de transparencia en el manejo de recursos públicos. Por el momento, el gobierno estatal ya proporcionó vigilancia especial tanto al político como a su familia… Por cierto, la Auditoría Superior del Estado, está endureciendo sus acciones legales en contra de exfuncionarios y contratistas de obras que incurrieron en presuntos actos de corrupción y cobro excesivo, para lo cual empezó a girar oficios para recuperar los recursos desviados mediante un procedimiento de deudas fiscales. Ya varios empresarios recibieron su notificación y no les quedará otra que devolver el dinero o enfrentar procedimientos penales… Hasta la próxima.