*El “Desastre”

*Lirú, Criminal

Desde luego, es evidente que el PRI, gracias al peñismo devastador, no podrá remontar la cuesta en los días que faltan para la elección presidencial. Sufragar por este partido, tras el desastre del régimen actual, sería para muchos un acto de masoquismo imperdonable. Además carecería de sentido ante la escasez de liderazgos y la inclinación, entre los mismos compañeros del señor peña, hacia las conflictivas y no las resolutivas entre una sociedad cansada, hastiada diríamos, de que le vean la cara. A esto debe adjudicársele las derrotas estatales y no a la negativa sobre el nuevo trato a las comunidades lésbico, gays, bisexuales y transexuales como alega el poco visionario y ya retirado Cardenal Norberto Rivera Carrera, quien desespera por candilejas y no mide sus propios límites, incluso constitucionales; se situó, antes de la llegada de Carlos Aguiar Retes, a un paso del desacato por lo cual se debiera entonces proponer una nueva reforma al artículo 130 que permitiera a los religiosos expresarse sobre cuestiones políticas; antes, no.

En esta tesitura, la aprehensión, desde hace un año, de Rubén Núñez y la “desaparición forzada” de Francisco Villalobos, líderes visibles de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), se inscribe en un contexto más viciado que el de Los Pinos y da lugar a dudas extremas sobre la verosimilitud de las denuncias sobre lavado de dinero y su contexto. ¿Por qué exhibirlas ahora, precisamente, cuando se desarrolla un movimiento civil en las calles, y a través de plantones que incomodan a los ahítos? Esta es la interrogante que nadie quiere responder y demuestra, por sí, la proclividad del ejército de la “inteligencia” al servicio oficial hacia el cumplimiento a rajatabla de las consignas superiores.

Porque, a estas alturas, hasta la “novia de Chucky”, Elba Esther de las catacumbas –de Polanco-, parece bastante vulnerable al lado de figuras intocables como el tío del sexenio, Arturo Montiel Rojas, matrimoniado por cuarta ocasión en pleno festín aristócrata, Carlos Romero Deschamps, quien a imitación de “La Quina” pero sin autonomía alguna ha labrado su imperio eslabonando traiciones a los petroleros y Víctor Flores Morales, el pelafustán armado quien dice representar a un gremio en extinción, los ferrocarrileros. Y debemos mencionar a cada uno de los ex mandatarios vivos, a los gobernadores que se alejan impunes, a los empresarios cómplices de la cúpula del poder y hasta algunos, no pocos, elevados ministros de culto quienes dicen, como explicó el deleznable Onésimo Cepeda Silva:

--En México todavía las sotanas pesan más que la banda presidencial...

Y así parece ser si observamos la negligencia de las autoridades para proceder, por su parte y sin esperar que El Vaticano actúe, contra pederastas y delincuentes –fraudes al por mayor-, cuyos autores son sacerdotes de todos los niveles hasta llegar al color purpurado. Al parecer, con éstos el secretario de Educación, el delicadito Otto Granados, no tiene problema alguno pese al enorme número de colegios privados –con altísimas colegiaturas, sólo accesibles para ricos-, en manos de diversas órdenes religiosas comenzando con los desprestigiados Legionarios de Cristo cuyo fundador, Marcial Maciel Degollado, debe ser reo favorito de las llamas del inframundo.

En el círculo demoníaco de las relaciones políticas los “adelantados” se quedarán atrás y la ciudadanía habrá de reaccionar impíamente, esto es en contra del sistema falsamente intocable. No más miedo, ni conformismos –todavía peor lo primero-. Simplemente apliquemos el #cerocobardía y sentiremos que la asfixia merma.

Por las Alcobas

Pocos quieren recordar, y viene a colación por los acontecimientos recientes y la extraña repatriación del personaje, cómo fue aprehendido Héctor “El Güero” Palma Salazar, en 1995, a pocos meses del fin del mandato que convirtió en ominoso carlos salinas.

Viajaba en un JET LEAR –muy parecido al que fue túmulo para Juan Camilo Mouriño Terrazo en noviembre de 2008-, que debió realizar un aterrizaje forzoso en los límites de Nayarit con Jalisco, El “Güero” sufrió heridas no muy severas pero pudo rehabilitarse; tras el accidente, el gran “capo”, quien tomó el timón de mando del cártel de Sinaloa tras la captura de “El Chapo” Guzmán en 1993, pudo guarecerse y huir por unas horas con el uniforme de un oficial de la Policía Federal hasta que fue sorprendido y apresado. Fue obvio que quienes debían capturarlo, al momento de su encuentro, optaron por brindarle un “puente de plata”.

Unos días después se conocería la identidad de la dueña del aeroplano que se vino abajo precisamente cuando sobrevolaba una de las regiones dominadas por los narcotraficantes de la época –quienes mudan constantemente-. ¿Su nombre? Adriana Salinas de Gortari, hermana de carlos y raúl, divorciada de José Francisco Ruiz Massieu quien luego sería asesinado en septiembre de 1994, y madre de Claudita Ruiz Massieu, ex Canciller mexicana luego de haber pasado por la “afín” secretaría de Turismo, y actual secretaria general del PRI, el mismo cargo que tenía su padre cuando fue abatido. Todo un ejemplo el de esta familia, sin duda, la de los mayores escándalos políticos y criminales de la historia contemporánea.

loretdemola.rafael@yahoo.com