Al camposanto le pusieron el nombre de quien -se dice- tiene las llaves del cielo: San Pedro; pero nadie ha podido cerrar el paso a los facinerosos al panteón de El Jobo. Deudos de los que descansan allí, han reportado una serie de robos a las tumbas. Nadie pone freno a esta oleada delictiva.
“Ya ni gracia. Ni los muertos se salvan de la inseguridad”, dice una persona que hace el reporte a este medio. Ella ha sido víctima de reiterados robos y por ello hace su denuncia.
Indica que ya tienen localizados a los saqueadores de tumbas, pero no les hacen nada porque no hay flagrancia.
Sin embargo, es un secreto a voces que en el panteón San Pedro, se roban veladoras, flores, floreros, cruces y herramientas de limpieza que familiares guardan en las tumbas.
“Las autoridades de El Jobo no han hecho nada al respecto. El vigilante es un pobre anciano, y ya ha sido amenazado por esos ladrones, que si da parte a la policía lo van a navajear; -y creo que lo harán-, andan armados con cuchillos”, dice en su denuncia la mujer.
Por ello, la agraviada pide la intervención de la Policía Municipal de Tuxtla Gutiérrez, para que venga a inspeccionar, pero de noche, ya que e los robos y saqueos los hacen al amparo de la oscuridad”, aclaró.
El caso más reciente fue este sábado. La agraviada acudió ante las autoridades de El Jobo, pero no la atendieron porque no laboran el fin de semana. “Tengo entendido que muchas personas han reportado estos robos y no les han hecho caso”, concluyó la denunciante.