La judoca chiapaneca Itzel Pechá Tapia consideró que acudir a los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018 es un reto, pues además se puede ganar y hacer que el nombre de México vibre en el escenario internacional.
Luego de su título en la Copa Panamericana de Judo Cadete-Junior, en Lima, Perú, la competidora comentó que ser parte de una selección olímpica es un honor y más cuando se tiene el deseo de acudir a una justa olímpica de mayores.
“Tengo tiempo de querer dejar el deporte porque me desanimé por la pérdida de mi papá, pero me aconsejaron que tenía que tomarlo como una motivación más y pues eso es lo que me ayuda a seguir entrenando y a echarle ganas”, señaló.
La chiapaneca, que participa en la categoría -63 kg, destacó que el judo mexicano está en un buen nivel y en Buenos Aires 2018 se pude dejar en claro con un podio.
“Voy a cumplir dos años de haber perdido a mi papá. Estoy muy contenta de poder lograr los resultados esperados y es lo que quería lograr para que él esté orgulloso de mí”, añadió.
La seleccionada apuntó que el deporte es un escaparate para ser mejor persona y más cuando se es parte de una representación en la cual están los mejores para buscar brillar en las lides mundiales.
“En lo personal, sí aconsejo que los jóvenes practiquen un deporte y si es judo mejor, porque en lo personal consideró que el judo es un deporte formativo”, indicó.