La Pastoral de la Salud en Tuxtla
Aspecto de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez. Cortesía

El Servicio de Auxilio Nocturno Espiritual (SANE), perteneciente a la Pastoral de la Salud de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, cumplió los primeros ocho años de actividades.

Se trata de un organismo de la Iglesia Católica de orden diocesano. Se ocupa de llevar por medio del sacerdote los sacramentos de la unción de los enfermos y sagrada comunión (viático), a toda persona que se vea en peligro de muerte a causa de enfermedad o de algún accidente imprevisto durante la noche.  

El servicio es totalmente gratuito, y es durante la noche de los 365 días del año en los hospitales públicos y privados, Cruz Roja Mexicana, asilos de ancianos o domicilio particular del enfermo que lo solicite.

Por esta razón es necesaria la participación de los laicos para que sean ellos quienes trasladen al sacerdote a donde el dolor humano pida auxilio.

Participantes

Participan en este servicio el sacerdote por su ministerio ordenado, el cual tiene la obligación de repartir el sacramento de la unción de los enfermos y sacramento de la reconciliación propios de su acción sacerdotal.

Así como todos los fieles laicos hombres y mujeres de buena voluntad, conscientes de su misión evangelizadora, que pertenezcan a algún grupo o movimiento parroquial.

Para que este proyecto se lleve a cabo y cumpla su finalidad, médicos, enfermeras y trabajadoras sociales que laboran en los diferentes hospitales participan ayudando a identificar a los pacientes internados que estén en peligro de muerte o gravemente enfermos, especialmente aquellos que no tenga familiares para avisar al proyecto SANE, y puedan ser atendidos y auxiliados, respetando las creencias religiosas del personal y del enfermo. 

Participan también los familiares de los enfermos, ya que son ellos los cuidadores primarios, quienes tienen la obligación de buscar el auxilio espiritual necesario para su enfermo.

Historia

Fue un 26 de octubre, en Argentina, en la festividad de Jesucristo, Rey del Universo, del año 1952, cuando se puso en marcha por primera vez una guardia con un sacerdote y dos laicos, esperando en piadosa vigilia el llamado de algún enfermo necesitado de la gracia de Dios.  

Hoy esta obra se ha ido extendiendo a diferentes partes del mundo donde ha sido bien acogida, por los frutos que ha dejado en el mundo del sufrimiento y dolor de los enfermos.  

Nuestro país se une a este proyecto en el año de 1973, en la Ciudad de México un 19 de marzo en la festividad de San José, patrono de los moribundos.

Al igual que en otros centros, la iniciativa fue de un laico en necesidad: José Chávez, director en aquel entonces de la revista Señal.

Se unieron rápidamente al apoyo de esta obra el doctor Jorge Durán Piñeiro y el padre Florentino Rivera Rivera, que finalmente fueron ellos los que hicieron la primer guardia nocturna.

La Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, siendo arzobispo Rogelio Cabrera López, y obispo auxiliar José Luís Mendoza Corzo, se suma a este noble proyecto, pidiendo al Centro de Pastoral de la Salud Casa de enfermos Buen Samaritano la organización, difusión y realización de dicho proyecto, en asesoría y apoyo del padre José Alberto González Juárez (rector del Seminario Mayor) y el padre Adelfo Rodas Estrada (miembro de la comisión de formación permanente para sacerdotes y proyecto Casa Karol).  

Este proyecto dio inicio —en la capital de Chiapas— el día primero de noviembre de 2009 y abarca todos los hospitales locales, asilos de ancianos, Cruz Roja Mexicana y cualquier lugar o domicilio particular donde se le solicite.