Un tribunal de Pakistán ordenó poner fin al arresto domiciliario contra Hafiz Saeed, acusado de ser el “cerebro” de los atentados en la ciudad india de Bombay en noviembre de 2008, que dejaron al menos 166 muertos y más de 230 heridos, informaron fuentes judiciales.

La corte rechazó la petición del gobierno de la provincia paquistaní de Punyab de extender el arresto domiciliario de Saeed, pues no proporcionó “pruebas o una justificación” para prolongar la detención del líder islamista, acusado por India y Estados Unidos de organizar los atentados en Bombay.

Saeed, líder del grupo islamista Jamaat ud Dawa (JuD), incluida en la lista de organizaciones terroristas de Estados Unidos, fue detenido el pasado 30 de enero en una mezquita de Lahore, este de Pakistán, y desde entonces ha permanecido bajo arresto domiciliario.

Según el fiscal Sattar Sahil, la orden de arresto era válida para tres meses y cada trimestre un tribunal decidía la ampliación de la pena o la puesta en libertad de Saeed.