Liberan a Eduardo Ramírez Aguilar

Habitantes de Chenalhó liberaron la mañana de este jueves al presidente del Congreso del estado, Eduardo Ramírez Aguilar, al diputado Carlos Penagos y a un chofer, retenidos ayer por la tarde en San Cristóbal, informaron fuentes oficiales.

Dijeron que poco antes de las 10:30 horas, Ramírez Aguilar y sus acompañantes abandonaron Chenalhó en un helicóptero del Gobierno del estado, que los trasladaría a Tuxtla Gutiérrez, en el que viajó también el legislador Mariano Díaz Ochoa, que participó en una mesa de diálogo en la cabecera.

Añadieron que la liberación ocurrió después de que Ramírez Aguilar tomó la protesta al alcalde sustituto, Miguel Sántiz Alvarez y a los demás miembros del Ayuntamiento, designados en plebiscito público en abril pasado.

Señalaron que el presidente de la Legislatura tomó la protesta a las nuevas autoridades, luego de que esta madrugada el Congreso local aceptó en sesión extraordinaria, la solicitud de licencia presentada por la presidenta Rosa Pérez Pérez, del Partido Verde Ecologista de México.

Pérez Pérez ya había presentado su solicitud de licencia el 13 de abril pasado, pero argumento que fue bajo presión, por lo que el Congreso no la aceptó.

Ramírez Aguilar, Carlos Penagos y el conductor fueron sacados violentamente ayer a las 16 horas de la sede de la Diócesis de San Cristóbal, por más de 30 hombres encapuchados y trasladados a Chenalhó para presionarlos, con la finalidad de que fuera destituida Rosa Pérez.

Los hechos ocurrieron cuando una comisión de los opositores a la presidenta estaban reunidos con Ramírez Aguilar y otros diputados, bajo la mediación del vicario de Justicia y Paz de la Diócesis, Gonzalo Ituarte Verduzco, para tratar de encontrar una solución al conflicto en Chenalhó, que estalló el 8 de abril pasado, debido a que la ahora exalcaldesa no cumplió los ofrecimientos de campaña y marginó a los demás miembros del cabildo, según sus detractores.

Después de su liberación, Ramírez Aguilar sostuvo “que en Chenalhó se actuó de manera responsable para privilegiar la paz” y agregó que durante su estancia en ese municipio tzotzil, “se dialogó abiertamente con la población y se escuchó a las autoridades tradicionales reunidas en la explanada”.

Mediante un comunicado, dijo que en todo momento fue tratado “con respeto”, aunque reconoció que los pobladores lo vistieron con una blusa tradicional de mujer “para desacreditar a la autoridad, no a su persona”.

En conferencia de prensa posterior manifestó que “no me siento lastimado ni ofendido, entiendo las causas”.

Una vez concluida la toma de protesta de las nuevas autoridades y de la entrega del simbólico bastón de mando, de la entrega de las chequeras y de los vehículos, los inconformes devolvieron el palacio municipal que habían tomado el 8 de abril para exigir la destitución de Rosa Pérez.