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Es un excelente thriller psicológico que viene avalado por el enorme éxito cosechado en el mercado anglosajón. La protagonista, Rachel Watson, es una mujer deprimida que, luego de un divorció, se ha refugiado en el alcoholismo.

Rachel toma siempre el tren de las 8:04 a.m. Cada mañana lo mismo, el mismo paisaje, las mismas casas y la misma parada en la señal roja. Son solo unos segundos pero le permiten observar a una pareja desayunando tranquilamente en su terraza. Con el tiempo, siente que los conoce y se inventa unos nombres para ellos: Jess y Jason, cuya vida es perfecta, no como la suya. Pero un día ve algo; sucede muy deprisa pero es suficiente. ¿Y si Jess y Jason no son tan felices como ella cree? ¿Y si nada es lo que parece? Tú no la conoces, ella a ti, sí.

Con este argumento, la autora Paula Hawkins construye una buena historia, con capítulos cortos y utilizando el punto de vista de tres de los personajes de la novela: Rachel, Megan y Anna, la actual pareja de su ex. La narración es ágil y brillante, con un ritmo que va creciendo y con giros inesperados. La lectura se vuelve adictiva, absorbente y en ocasiones claustrofóbica. Nada es lo que parece.

En resumen, tenemos entre la manos un estupendo thriller psicológico, con unos personajes bien definidos, narrado de forma ágil y dinámica y que nos hace vivir momentos de tensión y angustia.

La vida de Rachel está acabada, amenos para ella, ha caído en un agujero del que no puede salir y tampoco es que tenga mucha intención de moverse de allí. Su antigua relación no solo ha finalizado sino que no puede pasar página, no habla con su familia y en el trabajo tampoco le va bien. Así que para olvidar cómo es su vida, mira por la ventana del tren y se imagina cómo es la vida de los demás, pero hay una pareja en particular que la tiene obsesionada, tanto que un día ve algo y sabe que debe hablar con la policía porque su testimonio lo cambiará todo.

Lo más importante de la historia es Rachel, la protagonista, mentirosa y borracha; es un personaje difícil de querer, pero en muchas ocasiones nos sorprendemos a nosotros mismos entendiendo su dolor. No solo porque es la que narra la gran parte de la novela sino porque todo gira en torno a ella y la necesitamos para descubrir qué está pasando.

El egoísmo y la imperiosa necesidad de recibir atención se mezcla con el dolor por la traición de su exmarido y con su incapacidad para recuperarse de los golpes de la vida, y aunque esto no la convierte en alguien que nos guste, sí que podemos, al menos, comprenderla. Al mismo tiempo, tampoco podemos confiar en ella, puesto que la mayor parte del tiempo está borracha, así que todo lo que ve no tiene por qué ser real.

La novela no solo está contada por ella sino también por otras dos mujeres: Megan y Anna. Cada una nos irá contando en sus capítulos uno o varios días de su vida. La cronología cambia, así que puede que leas lo que le ocurrió a una hace un año y después a otra hace un par de días. Suena un poco complicado pero la trama es bastante fácil de seguir.

En definitiva, un libro que promete y cumple. Te enganchará desde el primer capítulo, los personajes son muy humanos y no adivinará quién es el culpable sino hasta el final.

La trama fue llevada al cine con guion de Erin Cressida Wilson y dirigida por Tate Taylor. Tiene como protagonistas principales a Emily Blunt, Rebecca Ferguson y Haley Bennett.