Narra la historia de María, una joven de un pueblo de Brasil que, en un viaje hacia Río de Janeiro, se encuentra con un suizo que le propone fama y fortuna a cambio de que ella baile en su discoteca. Allí, en la ciudad de Genéve o Ginebra para los extranjeros, descubre lo que es el verdadero amor, conoce una parte de sí misma que antes desconocía, se enfrenta con los prejuicios de la sociedad, y descubre el significado de lo que es el sexo sagrado.
Pero antes de todo ello y después de que la despiden del empleo que nunca fue lo que ella creyó, con la barrera del idioma que la separa de los residentes y viéndose atrapada por la desesperación, María opta por vender su cuerpo. Entonces, cuando conoce al joven y guapo pintor Ralf Hart, ella sabe que es el único que puede salvar su alma y encontrar su “luz” interior.
En cada frase o párrafo, siempre hay una enseñanza. Con personajes sorprendentes y con una forma de narrar fascinante, Paulo Coelho te deja con ganas de seguir leyendo. Es una lectura amena, sin tapujos, motivadora y, a la vez, ligera y rápida que.
Es una historia de amor como tantas otras, pero el tema central es algo que no se encuentra mucho en las novelas románticas de estos tiempos. ¿Por qué once minutos? Once minutos de sexo propiamente dicho. Una historia realista, que marca los puntos claros del romance, el placer, el autodescubrimiento, el amor, entre otros temas. Es el libro perfecto para salir de la monotonía a la que muchos estamos acostumbrados.