Lleva Anahí de Velasco información sobre el cáncer a estudiantes

La señora Anahí de Velasco realizó una visita sorpresa al Centro de Educación Básica del estado de Chiapas (Cebech), donde convivió con las alumnas de secundaria, quienes la recibieron emocionadas.

La esposa del gobernador Manuel Velasco Coello, acompañada por las autoridades de la institución educativa, llegó al auditorio que se inundó con los aplausos y gritos de las jóvenes.

Mientras avanzaba por las escaleras hacia el escenario, las estudiantes brincaban de la emoción y sonreían, ya que no esperaban la visita de la excantante. 

Por su parte, Anahí de Velasco, luego de agradecer las muestras de cariño, explicó que el motivo de su visita al Cebech era llevar una plática preventiva sobre el cáncer, a fin de sensibilizarlas pues esta enfermedad no conoce edad, rango social, económico, ni educación, por ello es necesario llevar a cabo medidas preventivas que ayudan a detectar a tiempo dicho mal.

Posteriormente fue el turno de Claudia Santillana Rivera, presidenta de la fundación Un Paso a la Vez, y sobreviviente del cáncer, quien compartió con las jovencitas su propia experiencia, cómo enfrentó la enfermedad, los tratamientos que la llevaron a perder el pelo y la fortaleza que logró mantener a pesar de una recaída. Como resultado de esta dolorosa situación, produjo un documental donde se plasmó la vivencia de diferentes mujeres.

Anahí de Velasco y el auditorio, abarrotado de adolescentes, se conmovieron con la historia de Claudia Santillana Rivera, quien enfrentó el cáncer a los 30 años de edad.

Al finalizar el documental, Anahí de Velasco reconoció el esfuerzo y las ganas de vivir de Claudia, al tiempo que exhortó a las estudiantes de secundaria a incluir en su rutina algunas medidas preventivas que pueden, en un momento dado, salvar su vida.

La esposa del gobernador, antes de partir, convivió con las jóvenes y se tomó fotos del recuerdo con ellas.

Amable y sencilla durante el encuentro, Anahí de Velasco se retiró de las instalaciones del Cebech, mientras que al fondo se escuchaban aún los murmullos y risas de las jovencitas que seguían sorprendidas por la visita.