Un joven pereció ahogado en las aguas del Grijalva, de manera trágica. Luego de embriagarse subió a su carro, pero en vez de avanzar hacia adelante, se fue de reversa y se metió al afluente. El cuerpo estuvo desaparecido dos días. Lo rescataron ayer por la mañana.
Se llamaba Rubisteín Aguilar. Apenas cumpliría los 25 años en agosto.
El día domingo 26 de julio, se levantó sombrío. Sin articular palabra tomó su sombrero, se calzó las botas inseparables, tomó la llave de la camioneta de su papá y sin pedir permiso enfiló a la orilla del pueblo conocido como Embarcadero Apic Pac.
El joven, mejor conocido en el lugar como “El Caballo” (porque le encantaba montar y porque al jugar fútbol corría como un equino desbocado), condujo la camioneta marca Chevrolet tipo Cheyenne modelo 1992 de color blanco.
Iba despacio, como si quisiera retardar su llegada sin rumbo. Y detuvo el auto frente a la cantina del pueblo. La dejó de subida, en la calle empinada. Con la góndola apuntando hacia el río Grijalva.
Y el joven comenzó a embriagarse. Lo hizo durante horas. Ahí desahogó sus penas entonando canciones de desamor, como Por tu maldito amor, de Vicente Fernández, Tu infame engaño, de Los Temerarios, entre otras.
El llanto le nubló la vista y también la razón al joven. Quien dolido en lo más profundo de su alma por la traición de su amada novia, salió como loco del bar.
Encendió su auto. Pero cuando todos esperaban que la camioneta avanzara hacia adelante, se fue hacia atrás. Y el vehículo se hundió más de 10 metros en el afluente.
Nadie volvió a ver a Rubistein. Algunos creyeron que salió y nadó a la orilla. Pero pasados dos días, sus padres comenzaron a buscarlo.
Algunos testigos indicaron que vieron la camioneta sumirse en el agua, pero no vieron si iba el joven.
Así que con la ayuda de buzos y de lugareños que nadan bien, comenzaron a buscar el auto. Y lo hallaron. Estaba a 15 metros de la orilla y a 10 de profundidad, frente a la zona conocida como Na´Atuwi.
Atrapado entre el volante y la palanca de velocidad, quedó el cuerpo del joven.
Todos lloraron la tragedia. Pueblo chico, dolor grande. Unos creen que fue accidente, que el joven lo dejó en reversa sin darse cuenta. Otros, consideran que fue suicidio. Que el muchacho no pudo soportar que su novia se fuera con otro.
El cuerpo sin vida fuer llevado al anfiteatro de Ocozocoau-tla, para la necropsia de rigor y continuar las investigaciones.