Para combatir el sobrepeso y la obesidad, y con ello evitar mayores males crónicos, el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF) arrancó ya el cambio en los desayunos escolares: pasarán de ser alimento frío a caliente, además de que se elimina comida como barras energéticas y leches endulzadas.
Se trata de seis millones de desayunos que se distribuyen a la población más vulnerable del país: niñas, niños y adolescentes, y de los cuales al menos la mitad se distribuye en frío, lo que conlleva en muchos de los casos a que no se ingieran.
La titular del DIF nacional, María del Rocío García Pérez, subrayó que el cambio se dará de manera paulatina: se inició ya y se espera que para finales de 2020 esté implementado al 100% en todo el país. Para ello, expuso, se requerirá de cambios en infraestructuras: instalación de comedores en centros educativos o en los alrededores de éstos, para que los alimentos se distribuyan calientes.
La funcionaria federal señaló que se cuenta con 12 mil millones de pesos para hacer la transformación.
Expuso que México se encuentra dentro de los primeros lugares a nivel mundial con el mayor índice de sobrepeso y obesidad infantil, con cifras que alcanzan en promedio al 33.2% de niñas y niños en edad escolar.
Por su parte, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Ramírez-Gattel, mencionó que se busca establecer una política de estado sobre la prevención del sobrepeso, la obesidad, la diabetes y todo un conglomerado de enfermedades crónicas.