Lo que está en juego: el súper bowl de la política

Conviene reflexionar lo que está en el destino de las manos del ciudadano, y que eligieran los destinos del buque llamado México.

Se empieza por la Presidencia de la República, uno de los poderes de la Unión, cuya competencia real está entre Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez.

Como es su atribución, la ganadora podrá nombrar a los secretarios de Estado y directores de las empresas de participación estatal como, por ejemplo: Pemex, la CFE, etcétera.

Este poder que tiene el mandatario es clave para la ejecución de políticas públicas que el país y la sociedad mexicana requiere, y es el gabinete legal y ampliado sobre quien descansa dicha responsabilidad para la conducción del navío que es el país.

También se elegirá por parte del electorado a quienes integrarán la Cámara de Senadores y Diputados a nivel federal. Es decir, al Poder Legislativo, cuyos integrantes les corresponde hacer y reformar las leyes generales y federales que brindan el marco normativo de las políticas públicas.

Al igual que el poder que ostenta el Ejecutivo, la labor del Legislativo también es muy importante, en virtud de no solo significar la representación del pueblo mexicano en los distritos y circunscripciones electorales, sino que, de su conformación, quien tenga la mayoría podrá realizar legítimamente los cambios al marco normativo del país que considere necesarios para cumplir con los objetivos de nación que trace para su sexenio.

Si bien no es parte del poder federal, al ser la depositaria de los tres poderes de la Unión, la Ciudad de México es políticamente relevante. En este año se elegirá al jefe de Gobierno, al Congreso local y las dieciséis alcaldías.

Aquí se está poniendo muy interesante la elección porque no hay nada escrito. Si bien Clara Brugada va arriba, el joven opositor Santiago Taboada está trabajando y acercándose más a la puntera en las encuestas.

También están en juego las dieciséis alcaldías, donde se han dado sorpresas por parte de Morena y no han sido del agrado del electorado o de los simpatizantes. El tema es tan importante que esa elección está también en juego, por ejemplo, la designación del próximo fiscal de Justicia de la Ciudad de México.

En este juego político también las nueve gubernaturas: Ciudad de México, Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán, donde es posible advertir que la política local tendrá un mayor peso que la dinámica nacional.

Dos cosas son claras, una que Claudia va arriba y va navegando con rumbo a la victoria. Lo demás está por verse y cada día se mueven las simpatías del electorado y algunas andan muy herméticas, por lo que nada está escrito. Y la otra, que las ciudadanas y los ciudadanos se llevarán los reflectores por un fin común: México.