Los partidos políticos tendrán un periodo de gracia de un año para depurar sus padrones de militantes, y se suspenderán casi 12 mil procedimientos sancionatorios abiertos que implicaban sanciones estimadas en 800 millones de pesos.

La Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos del Instituto Nacional Electoral (INE), avaló de manera preliminar un régimen de excepción para la revisión, actualización y sistematización de los padrones, con lo que busca resolver la crisis jurídica y financiera que viven los partidos por las miles de quejas pendientes de resolver por afiliación indebida.

El acuerdo permitirá que en enero de 2020 tengan listados de afiliados depurados, luego de que se dé de baja a los ciudadanos que denunciaron haber sido inscritos de manera irregular y sin consentimiento, e iniciar un periodo de refrendo de militantes.

En ese lapso, las casi 12 mil quejas pendientes de resolver por afiliación forzosa —la mayoría en contra del PRI y PRD— se suspenderán, y con ello la imposición de multas, para ser retomados al final del proceso depuratorio.