Tres organizaciones ubicaron a Puebla en los primeros lugares en el nivel nacional con el mayor número de casos de violencia política durante el actual proceso electoral.

Al corte de abril, Causa en Común y Laboratorio Electoral señalaron a Puebla con dos asesinatos y un intento de secuestro de aspirantes y candidatos a un cargo de elección popular.

Incluso, Laboratorio Electoral consideró que la entidad se ubica en la media nacional en violencia política, es decir, en semáforo amarillo.

El primer asesinato ocurrió en julio de 2023: el excandidato del PAN a la alcaldía de Chiautla de Tapia, Javier Torres Barrera, quien fue raptado por un comando y horas después su cuerpo fue encontrado cerca de la comunidad San Juan del Río.

El segundo político que perdió la vida fue Jaime González Pérez, precandidato a la alcaldía de Acatzingo por Morena, asesinado el 23 de marzo. Su cuerpo fue hallado sin vida en su negocio.

En tanto, Integralia Consultores solo contabilizó el asesinato de Jaime González, pero ubicó a Puebla en la quinta posición en agresiones contra aspirantes a cargos de elección popular con 11 intentos (ocho oficialistas y tres de oposición).