La tarde de este jueves fue presentado el libro Ingenio de un chiapaneco, escrito por Luis Pedrero Pastrana, en el cual se narran las experiencias y logros que ha tenido este empresario tuxtleco con el mundo de la creatividad y las invenciones durante toda una vida.
Ante la presencia de amigos y familiares, Pedrero Pastrana dijo que este libro, el segundo de su autoría, tiene como propósito incentivar la creatividad de todas aquellas personas que tiene esa curiosidad por inventar y que en su caso inició desde la infancia.
En este libro se encontrarán anécdotas de su infancia y madurez con el mundo de la invención y de cómo a través de la dedicación logró plasmar aquellas ideas en objetos tangibles y ponerlos en funcionamiento.
Pedrero Pastrana hizo una invitación para que todos los jóvenes creadores de Chiapas se atrevan a hacer realidad sus sueños e ideas.
Luis Pedrero cuenta con tres registros de patente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial. El primero de ellos es un recolector acuático, conocido como Cocodrilo, el cual fue diseñado para ser usado en los trabajos de limpieza en las aguas del Cañón del Sumidero.
A pesar de su efectividad, el Cocodrilo fue desaparecido durante el gobierno de Pablo Salazar Mendiguchía.
La segunda patente se refiere a un filtro de olores, llamado asiento desodorante, que está dirigido a las personas con problemas de incontinencia.
El ultimo invento que patentó el empresario tuxtleco es un aparato para la iluminación de albercas.
Luis Pedrero lamentó la falta de apoyos para los inventores de este país, así como lo difícil que es lograr obtener la patente que proteja las creaciones que se hacen en Chiapas y en todo México.
Actualmente Luis Pedrero tiene el objetivo de patentar dos inventos más a su catalogo, uno es el caleidoscopio electrónico y el otro es una cortina que contrario a los que conocemos de manera cotidiana, tiene la peculiaridad de abrirse de arriba hacia abajo.