El obispo de San Cristóbal de Las Casas, Rodrigo Aguilar Martínez, demandó justicia por el asesinato del periodista Mario Gómez Sánchez, ocurrido el pasado viernes 21 de este mes.
En rueda de prensa después de la misa que ofició a las 12 horas en el Centro Pastoral, añadió que “desgraciadamente, el primer caso puede dar lugar a otros más”.
Pidió que “se investigue las causas del asesinato y se ejerza el Estado de Derecho, de modo que los culpables paguen jurídicamente lo que corresponde”.
Señaló que “es doloroso que un comunicador sea asesinado; tal vez (lo mataron) por lo que sabía y querían callarlo, pero es importante que la comunicación no se calle; cuando es verdad y justicia hay que seguir denunciando”.
Advirtió que cuando se trata del primer caso del asesinato de un periodista, como ha sucedido con Gómez Sánchez, “desgraciadamente se abre la puerta a tantas otras situaciones de violencia de este tipo que se han dado en otros estados del país; ojalá que aquí no sigan”.
“Es triste y desgraciadamente, el primer caso puede dar lugar a otros más”, remarcó el obispo.
Demandó que se investigue y que “las autoridades no vean privilegios sino la búsqueda de la verdad y la justicia”, al tiempo de destacar que si ya el comunicador había denunciado amenazas en su contra, “hay antecedentes para la investigación de este hecho doloroso”.
Aguilar Martínez reiteró que “es doloroso cuando se pierde el sentido de respeto y comunicación; se puede discutir, pero siempre buscando la verdad, no imponerse sobre los demás. Como nos invita el Papa Francisco, a hablar con claridad y valentía, a escuchar con respeto y humidad; de esta manera se busca juntos la justicia y la paz, no aplastando a los contrarios sino ayudando a construir la sociedad todos juntos”.
A pregunta expresa, el obispo también comentó respecto al enfrentamiento entre habitantes del ejido Cuxtitali, sucedido en San Cristóbal el pasado jueves, con resultado de un muerto, cuatro lesionados y 13 detenidos.
Cuando hay muertos, las cosas se complican más porque “desgraciadamente la sangre invita a más violencia, pero es importante recapacitar y que la violencia no genere más violencia”, aseveró.
Lamentó que muchas personas estén armadas. “La historia del estado ha tenido momentos de violencia armada y con derramamiento de sangre. Es importante que demos un alto, pero con la escucha mutua, con la cordura, la compresión y el respeto”, manifestó.
“Todos podemos tener parte de verdad y parte de violencia. Entonces, que sepamos escucharnos, que nazca de nuestro corazón el aspecto positivo, buscar que la paz sea porque se integra la verdad, la justicia, la libertad y el amor mutuo”, finalizó.