Papa y patriarca Cirilo I, firman declaración

El papa Francisco y el patriarca ortodoxo de Moscú, Cirilo I, firmaron una declaración conjunta histórica después de un diálogo de dos horas que sostuvieron ambos en una sala del aeropuerto internacional José Martí.

El texto, redactado originalmente en ruso e italiano, fue firmado por los líderes religiosos sentados en un mismo escritorio de madera. Al final, cada uno de ellos tomó la palabra para pronunciar un breve discurso.

En el documento, el pontífice y el líder ortodoxo expresaron su angustia por la persecución contra los cristianos en todo el mundo, especialmente en el Medio Oriente y en el norte de África, además de condenar el terrorismo.

Constataron el éxodo masivo de cristianos de Siria, Irak y otros países de la región, donde la violencia ha cobrado miles de vidas, dejando sin hogares y medios de sustento a millones de personas.

Hicieron un llamado a la comunidad internacional a unirse para poner fin a la violencia y al terrorismo; a tomar medidas inmediatas para evitar el desplazamiento de los cristianos y al mismo tiempo, a través del diálogo, a contribuir a una pronta obtención de la paz civil.

Urgieron el envío de ayuda humanitaria de gran escala para el pueblo que sufre y para los países vecinos.

“Dirigimos a todas las partes que puedan estar involucradas en los conflictos un ferviente llamado para manifestar buena voluntad y llegar a la mesa de negociación. Al mismo tiempo, es necesario que la comunidad internacional haga todos los esfuerzos posibles para poner fin al terrorismo mediante acciones comunes, conjuntas y sincronizadas”, establecieron.

“Hacemos un llamamiento a todos los países involucrados en la lucha contra el terrorismo, a las acciones responsables y prudentes”, añadieron.

Más adelante defendieron a la familia como el centro de la sociedad y dejaron en claro que ésta sólo puede estar fundada por el amor entre un hombre y una mujer.

También criticaron la expansión de la eutanasia y el uso extendido de las tecnologías biomédicas de reproducción, “porque la manipulación de la vida humana es un ataque contra los fundamentos del ser persona”.

Asimismo, deploraron el enfrentamiento en Ucrania que “ya cobró muchas vidas, causó sufrimientos innumerables a los civiles, hundiendo a la sociedad en una profunda crisis económica y humanitaria”.

“Hacemos un llamado a todas las partes del conflicto a tener prudencia, mostrar solidaridad social y trabajar activamente para el establecimiento de la paz”, ponderaron.

Al tomar la palabra, tras firmar la declaración, el patriarca Cirilo aseguró que en las dos horas de coloquio con el papa tuvieron una “discusión abierta”, donde se escucharon las posiciones mutuas y se concluyó que ambas Iglesias pueden cooperar defendiendo a los cristianos en todo el mundo.

El papa Francisco, por su parte, coincidió en que ellos hablaron “claramente y sin medias palabras”, estableciendo una serie de iniciativas que consideró “viables” y que “se podrán realizar”.

“No quiero irme sin dar un sentido agradecimiento a Cuba, al gran pueblo cubano y a su presidente aquí presente. Le agradezco su disponibilidad activa, si sigue así Cuba será la capital de la unidad”, concluyó.