Una de sus pasiones ha sido la actividad política y por eso fue, entre otras cosas, gobernador de Chiapas y Secretario de Gobernación después, en cuyos desempeños demostró ser un celoso guardián del Estado de Derecho.
Pero hay otro entusiasmo suyo: es un convencido ambientalista y protector de la flora y fauna silvestres.
Se trata de José Patrocinio González Garrido quien, durante el desempeño de esas importantes funciones públicas, fue un férreo defensor de la ecología y entusiasta promotor de un marco legal que prohibiera los incendios forestales y la tala indiscriminada de árboles.
Precisamente por sus destacadas y permanentes contribuciones al cuidado y conservación del medio ambiente, la Sexagésima Sexta Legislatura de Chiapas aprobó recientemente que él reciba este año la medalla “Miguel Álvarez del Toro”.
Quienes ya nos desempeñábamos como reporteros en el periodo que fue gobernador (1988-1993), recordamos muy bien a González Garrido como el impulsor de importantes proyectos legales para proteger a la biodiversidad chiapaneca.
En 1988 las cifras de incendios forestales eran alarmantes y se documentó que Chiapas tenía la mayor superficie afectada por esos siniestros.
Los satélites especializados reportaron ese mismo año que las áreas con mayor calor del planeta fueron localizadas en Chiapas y Mozambique.
Por eso, desde el inicio de su mandato como gobernador a finales de 1988, puso manos a la obra y creó un amplio marco legal para favorecer el cuidado del medio ambiente, ordenó la revisión de los aserraderos, prohibió el uso de la leña como combustible y fue implacable en la prohibición de la tala ilegal de árboles y la prevención de incendios forestales.
Chiapas: acciones contundentes
A instancias suyas fue creada la Ley del Equilibrio Ecológico y Protección Ambiental en Chiapas; promovió la reglamentación de la famosa “tumba, roza y quema” con fines agrícolas; coadyuvó para que más de cien mil hectáreas fueran declaradas como reservas ecológicas y 400 microindustrias que operaban con leña introdujeran el consumo de combustóleo o gas.
Una de sus acciones más trascendentales y polémicas de aquel entonces fue prohibir el uso de las motosierras, las declaró como armas prohibidas; estableció multas y cárcel contra quienes provocaran incendios forestales y lanzó en radio y televisión locales una profusa campaña de prevención de esos siniestros.
Para su realización, suscitó la participación de reconocidos artistas con fama nacional e internacional y que eran muy escuchados en zonas rurales, quienes grabaron mensajes en audio convocando a los ciudadanos a no tirar en la vía pública colillas de cigarro encendidas y a eliminar las prácticas tradicionales de tumba, roza y quema, como una forma de prevenir incendios.
Cantantes como Antonio Aguilar y Aída Cuevas, y actores como Julio Alemán participaron en esa campaña cuyos resultados fueron exitosos y altamente positivos.
Después de que Chiapas llevaba varios años ocupando los primeros lugares anuales en desastres ambientales, en el periodo gubernamental de don Patrocinio los incendios forestales se redujeron a cifras calificadas como históricamente positivas.
La propuesta para la entrega de la referida presea, argumenta que González Garrido “ha sido también un aliado permanente de los chiapanecos con grandes logros dentro de su administración en los que destaca: salud, medio ambiente, infraestructura y el respeto al estado de derecho.
“La lucha, el coraje y la defensa del patrimonio del estado de Chiapas demostrado por Patrocinio González Garrido ha sido fundamental para ser considerado a recibir este reconocimiento que el Congreso local otorga a chiapanecos ilustres, pues asume la visión que don Miguel Álvarez del Toro tuvo sobre el estado.
“Patrocinio González Garrido ha sido reconocido por sus aportaciones en el quehacer público en la política a nivel nacional y estatal, enalteciendo siempre el nombre de Chiapas”, apunta.
Eco Parque Aluxes, a favor de la vida silvestre
Es preciso recordar que ya dentro de su vida civil él se convirtió en uno de los más apasionados promotores de la creación en Palenque, en el norte de Chiapas, de un espacio grande y adecuado para la convivencia y conservación de fauna y flora regionales.
Así, nació “Aluxes Eco Parque Palenque” como un centro de conservación, rescate y reintroducción de la flora y fauna de la región, y en especial de las especies en peligro de extinción o gravemente amenazadas, del cual González Garrido es presidente honorario.
En su portal oficial, http://ecoparquepalenque.com, se explicita que tras la fundación del proyecto fueron plantados más de 10 mil árboles de 57 variedades diferentes y diversas plantas contempladas como un segundo y tercer estrato de vegetación y dentro de ellas se dio preferencia a aquellas que constituyen el alimento natural de la fauna de la región.
En ese mismo proceso, asegura el sitio, se rescataron los humedales del predio y se restableció el sistema de lagunas. El manejo del recurso agua y la diversidad de flora en cada uno de los vasos dio origen a una serie de microclimas que han propiciado la presencia de una gran diversidad de especies, que se desarrollan de manera silvestre.
Hoy, afirma, es incontable el número de aves que ahí tienen refugio, al igual que mariposas, reptiles e insectos y recientemente se pudo documentar y acreditar la presencia del Águila Elegante (Ornate Hawk Eagle, en inglés; nombre científico: Spizaetus ornatus) que no se había visto en la región desde los años ochenta del siglo anterior.
“Aluxes” surgió así como el primer centro de rescate regional.
Múltiples acciones realizadas por los operadores de dicho parque han permitido rescatar a la guacamaya roja que estaba extinta en la región desde hace más de 70 años y de la que pocos individuos quedaban en libertad en el resto del país, en especial en la Selva Lacandona y en Los Chimalapas.
Aluxes trajo guacamayas rojas de Xcaret, el Instituto de Biología de la UNAM determinó que son de la misma subespecie de las que hay en la Selva Lacandona, el Eco Parque construyó grandes instalaciones para criar los polluelos, alimentarlos con lo que encontrarían al ser puestos en libertad, capacitarlos para vuelo medio y auspició la formación de las parejas y los grupos que en libertad constituirían las parvadas que hoy se pueden ver volando en libertad.
Aluxes ha hecho seis liberaciones con éxito, la primera en abril del 2013, con una supervivencia jamás imaginada. Así se volvió a pintar de azul, amarillo y rojo el cielo de Palenque.
Otro resultado muy estimulante ha sido el de las mariposas. Hay un inventario con fotografía de 209 variedades distintas y presentes en diversas zonas de Aluxes. Se está trabajando en la reproducción de las plantas y flores necesarias para fortalecer esos sitios y para establecer un mariposario.
Un programa muy especial es el rescate de monos saraguatos o aulladores bebés, a quienes los traficantes ilegales les matan a sus madres para venderlos como mascotas y que la autoridad pone a disposición de Aluxes su cuidado. De ellos se han liberado tres tropas que ya se reproducen en libertad.
Otro programa es el relativo al rescate de manatíes, que ha iniciado con éxito.
También les ha entusiasmado el avance del programa de rescate de las ranas de ojos rojos, que pronto serán reintroducidas en Aluxes y después en la región y muchos más como el de los zenzos o pecaris de labios blancos, que en su oportunidad serán liberados, el del tepezcuintle, o de los loros cabeza azul y cabeza amarilla, y el del tapir para reproducción y reinserción.
Todos esos programas son acompañados con el desarrollo en vivero de las especies de plantas y árboles que propiciaran su supervivencia o bien del seguimiento de los protocolos necesarios para aquellas especies que no viven de la flora y requieren de condiciones de caza que les permitan su supervivencia y reproducción.
Hoy la familia Aluxes ha crecido y es más fuerte. Más fuerte para que Aluxes sea un santuario dedicado a el rescate de la vida silvestre. En todas las acciones de ese parque, están las ideas, las gestiones y las manos de don Patrocinio.
En honor a la conservación ambiental
De acuerdo con el decreto de su creación, la medalla “Miguel Álvarez del Toro” será impuesta por el titular del Poder Ejecutivo del Estado en sesión solemne del Congreso en agosto de cada año, para rememorar el aniversario luctuoso del célebre ambientalista.
Álvarez del Toro fue uno de los principales conservacionistas del medio ambiente y biodiversidad tanto de nuestro estado como del país, catalogado por la comunidad internacional como el último naturalista del siglo XX.
La medalla fue instituida para premiar a toda aquella persona de nacionalidad mexicana, que se haya distinguido por su contribución al fomento, desarrollo y cuidados del medio ambiente en grado eminente, como servidores de nuestro Estado, de la Patria o de la Humanidad.