Patrullajes nocturnos dan “luz” a tortugas golfinas
Patrullajes nocturnos dan “luz” a tortugas golfinas. Avisaín Alegría / CP

Los saqueadores de huevos de tortuga buscan el amparo de la noche, por eso después de las 10 de la noche, comienza el patrullaje policiaco y de la CONANP. Así, con el rescate de tres mil 500 nudos al año, se ha logrado que la tortuga Golfina ya no esté en peligro de extinción. El oficial Jaime Antonio es parte de este logro.

Sus manos cavan en la arena, en busca de los huevos de tortuga, no es para comerlos, menos para comercializarlos; es para evitar el saqueo. “El depredador número uno es el ser humano”, dice.

Jaime Antonio sale de la Sub Comandancia de la Policía Estatal Fuerza Ciudadana, en Puerto Arista, Tonalá.

Sube a la moto patrulla, la enciende, y con la luz de los faros encendida se enciende también la luz de la esperanza para preservar la tortuga Golfina que estaba en vías de extinción.

Jaime Antonio ha sido testigo de la maravilla de la naturaleza, pero aún no contempla una eclosión de los huevos. “Tardan de 50 a 60 días en eclosionar”, asegura.

Casi es la medianoche, sólo se oye el sonido del mar con algunas olas encrespadas y su llegada a la orilla, arrastrando arena.

Jaime Antonio se detiene, hallaron un nido, le coloca el número 161, mete la mano y comienza el conteo. Las tortugas ponen 100 huevos en promedio; este nido tiene solamente 92.

Mientras Jaime Antonio y personal de la CONANP guardan los huevos en los contenedores, explica que de cada mil crías, solo dos llegan a la etapa adulta.

Las tortuguitas nacen generalmente de noche y aprovechan la oscuridad para correr instintivamente hacia el mar, pocas lo consiguen, pues en el trayecto son atrapadas por los depredadores humanos y van a parar a las vitrinas de algún comercio o casa.

Por eso los recorridos son de noche, después de las 22 horas, con policías, porque los saqueadores intentan lastimar a los rescatistas que afectan su negocio ilícito.

En el recorrido por la playa, guían los de la CONANP. Los policías los protegen y entre todos protegen a las tortugas y los huevos.

Y mientras van a pie por la playa, ocurre algo hermoso, aparece una tortuga que llega en busca de un nido. La cámara capta el momento en que el animal comienza a desovar.

Este nido está protegido, como éste, al año se rescatan un promedio de tres mil 500, añade Jaime Antonio.

Los huevos rescatados son incubados para que las tortugas nazcan en cautiverio. Es así como nace aproximadamente del 60 al 70 por ciento de tortugas.

En su hábitat natural nace un 40 por ciento, pero están expuestas a ser saqueadas.

La jornada nocturna ha concluido, Jaime Antonio está satisfecho de ser parte de esta experiencia de contribuir con la naturaleza, de ver el milagro de la vida.

Jaime Antonio Marroquín, dice estar orgulloso de ser policía de la SSyPC, y orgulloso, muestra los 117 huevos recogidos del último nido. Éste rompió el récord.