Su pistola era de juguete, pero el robo fue en serio. El hombre fue detenido tras perpetrar un robo a comercio, a un cliente y a los empleados. Fue la acción oportuna de un policía lo que permitió recuperar el botín y detener al facineroso.
Su playera era blanca, pero la conciencia la tiene muy negra. Gusta de dinero fácil y lo obtiene robándole a gente honesta, esforzada. Esta vez eligió un comercio ubicado sobre la Calzada Samuel León Brindis, en la colonia Caminera de Tuxtla Gutiérrez.
Pistola en mano, pequeña, de color negro, el ladrón amagó al gerente, a los empleados y a un cliente. “Esto es un asalto. Denme lo que tengan de valor. No se opongan o disparo”, amenazó.
El gerente de la tienda de materiales para construcción, Germán González Perez, de 31 años, entregó el dinero de la venta, unos 18 mil pesos.
Por su parte, un empleado (Francisco Mendoza Gutiérrez) entregó tres tabletas electrónicas; mientras que un cliente, Juan Carlos de la Cruz Velázquez, de 58 años, dio dos mil pesos.
El asaltante huyó a pie, pero ni bien había avanzado dos cuadras, un moto patrullero de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana le obstruyó el paso. Es que tras recibir el reporte al 911, se activó la alarma de robo.
El elemento de la Policía Estatal Preventiva del Grupo Motorizado, estaba cerca, pues cubre el cuadrante que tiene como sede el módulo de vigilancia ubicado en la 14ª Oriente y 10ª Sur.
La capacidad de respuesta fue sorprendente. El facineroso fue sometido. Al lugar acudieron más elementos estatales y municipales. Incluso de Tránsito Municipal y del Estado.
Fue subido a una patrulla de la Policía Municipal y llevado a la Fiscalía Metropolitana. El elemento que hizo la detención encargó su moto a sus compañeros y fue a bordo de la unidad municipal. Los agraviados fueron a presentar su querella formal ante la Fiscalía General del Estado.