El gobierno de Estados Unidos inició este miércoles el remplazo de 3.6 kilómetros de la valla existente en la frontera entre la ciudad de Caléxico, California, y Mexicali, Baja California.

La obra consiste en la sustitución de los pedazos de metal y malla que están en ese tramo, por lo que no forma parte del muro prometido por la administración Trump, que todavía analiza y evalúa ocho diseños y prototipos.

El proyecto que se inició construirá una valla de 9.14 metros de altura con un diseño de balizas, confirmó a El Universal Carlos Díaz, portavoz de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) del gobierno de EU.

El cambio de tipo de muro será significativo, especialmente por la altura de la nueva barrera. El proyecto se espera que esté acabado en poco más de 300 días, y según los detalles del contrato que se adjudicó el pasado noviembre incluirá un puente sobre el Río Nuevo.