Reserva Natural El Triunfo, única en México
El quetzal es un ave que puede ser visible en la reserva.

La Reserva Natural El Triunfo, situada en la Sierra Madre de Chiapas, es catalogada como un lugar único en México. Cuenta con 10 diferentes ecosistemas dentro de su territorio, siendo el bosque de niebla el más importante, ya que a nivel mundial el 60% ha desaparecido. También es hogar de aves como el quetzal o el pavón, que aún se pueden encontrar en vida silvestre en este sitio.

“En México, el último gran remanente se halla en Chiapas y se llama El Triunfo. Existen áreas naturales con características similares al bosque de niebla en otros estados, pero son más bien como manchones, y no son catalogados como remanentes”, señaló Ana Valiere Mandri Rohen, directora del Fondo de Conservación El Triunfo (Foncet).

Actualmente, El Triunfo tiene alrededor de 119 mil hectáreas, que también albergan a grandes felinos como el jaguar y el puma, junto a mamíferos que se encuentran en peligro de extinción por la disminución de su hábitat, sin embargo, esta reserva es lo suficientemente grande como para que habiten de manera estable.

Gotas de lluvia

“Otro punto que vuelve muy importante a esta reserva, es que una de cada diez gotas de lluvia en México cae ahí. Esto por ser una de las sierras con más lluvias del país, alimentando a los ríos y arroyos que a su vez nutren al complejo hidroeléctrico del Grijalva”, agregó Valerie Mándrid.

Se sabe que hay fotógrafos de diferentes parte del país que realizan una espera de años para poder acudir a la reserva a realizar fotografías, atraídos por la belleza de las diferentes aves que ahí habitan.

La Reserva comprende nueve municipios del estado con un total de 14 mil habitantes, distribuidos en 34 comunidades. Algunos de los municipios tienen el 90 por ciento de su territorio dentro de la reserva, y otros solamente el diez por ciento.

Planes sustentables

Dentro de las comunidades se hallan familias que viven de manera marginada, pero el Foncet ha emprendido diferentes programas sustentables para que los habitantes tengan maneras de mantenerse, y a la vez cuiden los bosques donde habitan.

“Estos programas tienen que ver con desarrollo sustentable, es decir, planteamos que deben otorgar un valor a su bosque, que pueden recibir beneficios de cuidar su entorno, que hay maneras de mejorar sus actividades productivas, ya que de nada sirve cuidar un bosque si queman para cultivar”, enfatizó Mandri Rohen.

Esto ha favorecido que algunas comunidades hayan adquirido prácticas para mejorar la producción de su cultivo, evitando así las quema y tala de árboles.

Vicisitudes

Uno de los principales retos del Foncet es trabajar en conjunto con los diferentes entes gubernamentales, voluntarios, instituciones, organizaciones y dejar a un lado la labor en sectores para buscar un impacto de conservación de duración a cien años.

“Como país seguimos trabajando como sectores, es decir, al mismo lugar llega mucha gente y no necesariamente se encuentran coordinados; es como escribir con una mano e ir borrándonos con la otra. Hay que sentarnos todos en la misma mesa y ponernos de acuerdo sobre qué queremos hacer”, subrayó la directora del fondo de conservación.

Por otro lado, para el próximo año se espera un recorte al presupuesto federal. Esto traerá como consecuencia una reducción a los recursos destinados para el medio ambiente en México, ya que para el 2016 se aprobaron siete mil 291 millones de pesos, una disminución del 13% al presupuesto anual respecto del año pasado, un recorte estimado de 739 millones cien mil pesos, precisó.

Esto pareciera ser un contrasentido, ya que cada año las diferentes zonas urbanas invaden áreas verdes, lo cual origina deforestación, disminución de ecosistemas y por lo tanto de flora y fauna nativas y para combatir esta problemática se necesita de grandes recursos, los cuales deben ser bien encauzados.