Se arrepiente de ir al hospital

Justo cuando los paramédicos se disponían a subirla a la tabla rígida y luego a la ambulancia, la joven desistió. Se quedó dentro del coche. Eso sí, un compañero de trabajo deseaba que le dejaran el collarín. Un taxi había impactado el coche en el que viajaba como copiloto.

“Es que iba muy despacio y yo muy fuerte. Mi pasajero tenía prisa”, reconoció el chafirete. Era la mañana de este lunes, cuando de oriente a poniente se dirigía un coche rojo, marca Ford tipo Fiesta, placas DSW-3864. Conducía una mujer.

Como copiloto iba otra fémina. Al parecer ambas laboran en el Cobach. La unidad transitaba sobre el Libramiento Sur de Tuxtla Gutiérrez. Y luego de pasar frente a la PGR, faltando unos 200 metros para llegar a “La Antorcha” (Monumento a la Solidaridad), el coche fue impactado por atrás.

Es que el taxi tipo Tsuru, con número económico 3006 y placas 8164-BHE, iba muy aprisa. El taxista, en vez de rebasar por izquierda, prefirió chocar el coche. La copiloto resintió un fuerte esguince cervical. Se solicitó ayuda prehospitalaria.

Al lugar arribó la ambulancia PCAC-01, al mando del paramédico Víctor Liho. Tras valorar a la joven y considerar que ameritaba traslado, alistaron la camilla.

Pero justo cuando iban a subirla a la tabla, Ángeles Magdalena Ruiz Castañeda, de 30 años, dijo que siempre no. Un compañero de trabajo pidió que le dejaran el collarín, pero eso no era posible. Luego dijo que si más tarde la joven necesitaba traslado, que regresaran.

El oficial de Tránsito Municipal fue enérgico: “¡No! No es cuando ustedes quieran. Es ahorita que la iban a llevar pero no quiso. Al rato ya no van a regresar”, advirtió. Los autos estaban orillados y no trastocaron la vialidad.