Los cuerpos de los cinco habitantes de Santa Martha, municipio de Chenalhó, asesinados a balazos el pasado sábado 04 de agosto, fueron sepultados ayer en medio de mucho dolor e indignación, informaron fuentes de ese lugar.
Dijeron que los cuerpos de Domingo Hernández Pérez, Martha Hernández Sántiz y sus hijos Víctor, Cecilia y Lucio Hernández Hernández, fueron enterrados en el panteón comunitario de Saclún, donde residían, después de la misa celebrada de las 12 a las 13 horas.
Señalaron que como marca la costumbre, se realizaron actos tradicionales antes y luego les dieron cristiana sepultura a los cuerpos, en medio de una situación de tensión a pesar de la presencia de policías y militares.
Estas cinco personas fueron asesinadas a balazos la mañana del sábado cuando se dirigían a trabajar a su parcela, presuntamente por vecinos de Aldama, por la disputa de 60 hectáreas.
A la fecha suman 17 pobladores asesinados -14 de Santa Martha y tres de Aldama- por la disputa de tierras ubicadas en los límites entre Chenalhó y Aldama.
En este contexto, el obispo de la diócesis de San Cristóbal, Rodrigo Aguilar Martínez, hizo un llamado a que se instale una mesa de diálogo para encontrar una solución definitiva al problema, que deje conforme a las partes.
“El problema es complejo. No lo conozco, pero tiene que resolverse con la verdad, la justicia y la esperanza de que sea en el respeto de todos, no en la imposición de que unos ganen y los demás a ver cómo se las arreglan”, dijo.
Señaló que los hechos sucedidos del fin de semana son consecuencia de que “el problema se ha resuelto mal, equivocada o parcialmente, tiempo atrás”.
Finalmente, manifestó que “lo que yo recibo de comunicación del párroco es que siguen siendo problemas semejantes a los de Chenalhó y Chalchihuitán: dificultades por el territorio”.